Como cada semana recibo tus dudas e inquietudes para apoyarte como psicoterapeuta y sexóloga.
Pregunta:
Hola que tal, soy Lorena. Tengo 55 años, estoy casada, mi esposo tiene 59 años, tenemos 2 hijos mayores que ya no viven en casa. Mi esposo y yo hemos tenido una vida muy satisfactoria sexualmente, tríos, intercambios, swingers, orgías, etcétera.
Hace aproximadamente 8 meses tuve una infección vaginal muy fuerte y no tuvimos relaciones sexuales, durante la vida de casados nos había pasado varias veces, pero después de mi mejoría volvíamos a tener sexo. Esta vez fue diferente, muy diferente, mi esposo me decía que estaba muy preocupado por mí y que quería que me pusiera mejor, ya pasamos todos estos meses sin relaciones yo estoy desesperada, cada día me angustio más.
Después, vino lo peor, a mi esposo lo corrieron de su trabajo de una manera muy violenta, entonces cayó su ánimo hasta el suelo. Yo lo comprendí perfectamente y trataba de no molestarlo, pero luego le preguntabas que si algún día volveríamos a tener nuestra vida sexual como antes. Él se sentía presionado y yo angustiada, mala combinación. Un día al platicar sobre el tema nos gritábamos y nos ofendimos, después me dijo que no era que no me amara, sino que no tenía deseo.
A veces estaba de malas, otras muy triste, yo lo quería consolar y tocarlo, abrazarlo sin sexo, pero no siempre estaba dispuesto, me rechazaba.
Eso ha hecho que me sienta cada vez más ansiosa, siento que ya perdió totalmente el interés en mí, me siento vieja y veo que el sigue viendo a las mujeres más jóvenes con deseo, estoy insegura, devastada y sin esperanza. Ahora que no tiene trabajo tenemos más tiempo para nosotros, pero paradójicamente estamos más alejados que nunca.
Respuesta:
Lorena, muchas gracias por tu confianza, comprendo que es muy difícil el momento por el que están pasando.
Es muy probable que estés en el climaterio o ya en la menopausia, donde hay fuertes desajustes hormonales y el ánimo puede cambiar de un momento a otro.
Desgraciadamente vivimos en una sociedad donde está súper castigado envejecer, todos absolutamente todos los que somos maduros tenemos aunque sea un poco de miedo a la vejez, porque todos los días nos bombardean en todos los medios para resaltar los beneficios de la juventud y todas las desventajas de llegar a la vejez, y aunque ustedes no están aún en esa etapa, van hacia allá y ya les está pegando.
Es importante que como pareja hablen de todos sus miedos sin tabúes, si han tenido tan buena vida erótica es que han platicado mucho, no conviertan la vejez en un tema del que no puedan conversar.
Es comprensible que te sientas insegura en este momento, por la falta de deseo de tu esposo, pero cree en él, cómo has creído antes, si dice que te ama créele, esto puede ser transitorio; si lo saben manejar, puede ser sólo circunstancial.
Tu esposo ha pasado por cambios demasiado fuertes, no sólo en lo laboral, sino también al llegar a su edad, en donde muchos hombres ya se sienten ancianos cuando aún no lo son. Es muy importante, por ello, que vaya aceptando su edad con naturalidad y sin oponerse; es muy frecuente que los hombres que sienten que se les acaba la juventud la quieran retener viendo o hasta saliendo con mujeres más jóvenes. Puede que les resulte en un principio, la admiración por un hombre con experiencia cualquiera la tenemos, pero después de poco tiempo las diferencias se hacen abismales, precisamente porque las experiencias que pueda tener la gente madura, jamás las va a tener una persona joven. Además los intereses son totalmente diferentes.
En tu caso es importantísimo que valores la persona que eres, cada arruga o cada cana es una vivencia, es una experiencia, es algo totalmente tuyo y nadie te lo puede quitar.
Otra cosa que le puede estar pasando a tu pareja es que desde el momento que comenzó a evitar tener sexo pudo estar viviendo con estrés que se fue complicando con tus presiones inconscientemente y para rematar, el hecho de que lo hayan despedido de una forma violenta o inesperada, entonces se ponchó emocionalmente.
Él manifiesta estrés post traumático, suficiente para que no tenga ganas de tener sexo; indudablemente mi querida Lorena tiene que visitar a un psicólogo o psiquiatra.
Por lo que me cuentas ya pasaron más de ocho meses con los síntomas, creo que pudo estar empeorando durante estos últimos meses y ya puedo hablar de una disfunción del deseo, por ello, es importante que también recurran a un terapeuta sexual para solucionarlo.
Es muy normal que muchas personas piensen erróneamente que a cierta edad ya no importa explorar la sexualidad, pero recuerden que mientras se está vivo uno nunca deja de ser una persona sexual.
Espero que pronto resuelvan sus problemas y puedan recuperar su excelente y satisfactoria vida sexual.