REPORTAJE: PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ/ENLALUPA.COM
Hace más de 3 meses, trabajadores de un consorcio en el municipio de Colón iniciaron una colecta de alimentos para las familias de las comunidades con condiciones de pobreza, personas adultas mayores y con discapacidad, que representaban a los más vulnerables ante el Covid-19. Los empleados iniciaron un proyecto que duraría 1 semana o 2, pero cumplió 14 y podría volverse permanente.
Con fotografías y testimonios que demostraban la entrega de la ayuda a quien más lo necesitaba, poco a poco convencieron a otros trabajadores que reunieron y entregaron alrededor de 200 despensas en comunidades de Ajuchitlán, Santa Rosa Finca, santa Rosa de Lima, Los Benitos y Los Quiotes. El apoyo también se extendió a comunidades de Ezequiel Montes, como Villa Progreso y El Ciervo.
Después de ver el agradecimiento de quienes recibieron los apoyos, porque les da seguridad sobre qué comerán por varios días, hoy los trabajadores pretenden que el programa se quede de manera permanente y buscan apoyo de más gente, sobre todo de otras empresas que demuestren su responsabilidad social con los queretanos.
“La gente con discapacidad y los adultos mayores tienen una necesidad importante que terminando la pandemia va a continuar y esto nos genera una ocupación para continuar con un programa de responsabilidad social, queremos identificar las necesidades de las comunidades y gestionar un programa mayor, que no solamente dure el tiempo de la pandemia sino que sea a futuro y se quede”, declaró Mauricio Sosa, uno de los promotores del proyecto.
DOS FAMILIAS, LA CHISPA INICIAL
Mauricio Sosa, trabajador de la empresa High Tech Group, explicó que el proyecto inició como una iniciativa de las familias Murad y Waiss, cuando se dieron cuenta de que en muchas comunidades de Colón “la iban a pasar mal”, así que la idea se extendió entre todos los empleados, gente cercana al consejo y los socios de las 3 empresas que conforman el grupo High Tech.
Cada semana empezaron a sumarse más personas y se hizo necesario hablar con los delegados y subdelegados de cada comunidad para ubicar a los más vulnerables, en su mayoría adultos mayores y personas con discapacidad, que agradecen toda la ayuda que pueda llegarles.
“Ellos se enfrentan con una situación complicada, de por sí ya es difícil porque no tienen trabajo ni ingreso estable por la edad o por su condición, pues el agradecimiento es bastante a los donadores, incluso a nosotros que somos el vínculo, pero lo que nos preocupa es que la pandemia, aparte de evidenciar que esta gente no tiene recursos, es algo que no se va a frenar, no se va a parar”, adelantó.
Las personas que donan los apoyos reciben las evidencias de que su ayuda llegó a donde debía estar y eso anima a más personas. Como ejemplo, hace unas semanas se recibió una donación de despensas del área de Fisioterapia del Hospital Ángeles de Las Loma, después de ver que sí se entregaban los apoyos.
“PENSÁBAMOS QUE SERÍAN 2 SEMANAS”
Mauricio recordó que cuando se plantearon el reto de donar despensas, los trabajadores pensaron que sólo sería algo de 1 o 2 semanas, pero ya cumplieron más de 3 meses y el ánimo no decae. En este tiempo repartieron 200 despensas, están por recibir 50 más y tienen lo suficiente para continuar otras 6 semanas.
La intención es continuar hasta donde se pueda porque “cuando termine esto del Covid, se viene otro tema económico complicado, así que hay que apoyar a las comunidades. Ya sabíamos que el entorno que rodea a las empresas es importante, pero las empresas no solo deben dar trabajo en las comunidades, sino apoyarlas”.
El proyecto cobró fuerza porque se involucraron muchas personas, ante el rechazo a que la ayuda terminara con gente sin una necesidad real o que se utilizara de manera política, así que fueron los trabajadores quienes se acercaron a las comunidades, a los delegados y a las agrupaciones que trabajan con personas vulnerables.
“La idea es ayudar de manera directa, que esto sea permanente porque se ha sumado mucha gente. Tenemos otro proyecto que queremos impulsar, que será similar a los de Adopta a un Adulto Mayor o a una persona en vulnerabilidad, porque queremos sumar a nuestros colaboradores para que aporten una cantidad o una ayuda para esas personas y que quienes se sumen donen otra parte y así duplicar los apoyos”, adelantó Mauricio.
Este nuevo proyecto todavía está a la espera, porque primero quieren terminar la entrega de las despensas que ya se tienen para encontrar la manera de ayudar a las comunidades, porque es una responsabilidad social para quienes se encuentran en una situación mejor.