HISTORIA Y FOTOS: SANTOS MENDIETA/LALUPA.MX
Analizar la complejidad de los materiales desde el nivel atómico es algo que apasiona a Michelle Jaanai García Neria, joven queretana de 21 años de edad, quien estudia la carrera Técnico Superior Universitario (TSU) en Nanotecnología de Materiales en la Universidad Tecnológica de Querétaro (UTEQ) y que hoy no sólo se forma en esta institución académica, sino que, a través del modelo dual, tiene la oportunidad de adquirir experiencia en empresas de gran renombre, como lo es Gerber.
En entrevista con LaLupa.mx, Michelle Jaanai comparte qué la motivó a estudiar esta carrera en la UTEQ, así como la experiencia adquirida en la industria.
“Nanotecnología es el futuro de ahora y nos podemos dedicar a muchísimas cosas como la industria, en lo ambiental, en la industria alimenticia. Es una carrera que tiene mucho futuro y este mi mayor motivo del porqué estoy estudiando Nanotecnología”.
Desde que vio el plan de estudios de la UTEQ, Michelle Jaanai decidió matricularse en esta institución. Una vez aceptada se dio cuenta del nivel que tiene la universidad, especialmente los maestros, quienes en lo general son personas con amplios conocimientos y experiencia en el sector industrial.
“Los maestros son muy dedicados. Saben muchísimo y nos muestran mucho interés para que aprendamos. El plan cuatrimestral permite que sea más rápido, sí con más presión, pero terminamos más rápido”.
Por otra parte, el hecho de que la UTEQ contemple en su plan de estudios la realización de estadías en la industria, fue algo que convenció a Michelle Jaanai de que era la mejor opción.
“Me llamó mucho la atención porque a fuerzas tienes que estar en una empresa aplicando tus conocimientos. Esto me atrajo mucho, porque muchas universidades no encuentran esta posibilidad de entrar a una empresa y aplicar tus conocimientos que adquiriste en la universidad”.
Actualmente Michelle Jaanai se encuentra estudiando en el Modelo Dual en Gerber de Nestlé, específicamente en el Departamento de Ingeniería, donde convive con los instrumentistas y eléctricos, apoyando en la calibración de instrumentos, aprendiendo cómo son los procesos y, con la guía de sus compañeros más experimentados, ha podido adquirir mayor experiencia y aplicado lo que aprendió en la universidad.
“Te enseñan a automatizar máquinas desde la computadora. Eso es lo que hacen los instrumentistas, quienes utilizan todas las aplicaciones necesarias para automatizar y esto es lo que más he aplicado en Gerber”.
Michelle Jaanai reconoce que ha sido complicado estudiar de modo virtual, ya que se han perdido algunas prácticas que necesariamente eran presenciales; sin embargo, la ventaja de estudiar en la empresa es que los procesos se ven más de cerca y en aplicaciones que requiere la industria.
“Nos da la ventaja de que estamos estudiando en un nivel mayor, en un nivel industrial. Te das cuenta de que vas a adquirir responsabilidades y también que no es tan difícil como nosotros creemos que es cuando estamos estudiando la carrera, porque nos llenan de mucha información que dices: ‘¿Cómo voy a aplicar todo esto al momento que yo trabaje?’. Sin embargo, cuando te das cuenta que tienes muchos compañeros, a muchas personas que también siguen aprendiendo, es cuando adviertes que es un proceso que no es tan complicado como se cree”.
Una vez que culmine el TSU, Michelle Jaanai seguirá con la ingeniería. No obstante, su meta en el mediano plazo es seguir adquiriendo experiencia y conocimientos dentro de Gerber para, en un futuro no muy lejano, poder obtener una vacante en este lugar.
“YO QUERÍA ESTAR AQUÍ SÍ O SÍ”: CHRISTOPHER GARDUÑO
Cuando Christopher estaba por decidir qué estudiar, muchos amigos y conocidos le hablaron de la UTEQ, de su sistema educativo y de los maestros que imparten clases en este lugar.
“Fue mi primera opción estar aquí y yo quería estar aquí sí o sí”, afirma Christopher Enrique Garduño Olivares, joven de 19 años, quien actualmente estudia el TSU en Mecánica Área Automotriz.
Christopher, quien tiene un promedio general de 9.3, comparte que lo que más le gusta de estudiar en la UTEQ es aprender de los maestros, quienes son perfiles muy experimentados y que tienen muchos conocimientos y experiencia adquirida al trabajar en empresas de talla internacional.
“Las instalaciones con las que contamos son muy buenas. Los apoyos que ofrece la escuela también son excelentes. La UTEQ nos brinda todo para que podamos seguir adelante y terminar nuestra carrera”.
El estudiante universitario recuerda que, antes de la contingencia por Covid-19, en la UTEQ tuvo la oportunidad de realizar prácticas en los laboratorios de Peugeot, donde los alumnos podrían interactuar, desarmar y armar distintos modelos de motores.
Durante la modalidad virtual, maestros y alumnos se han valido de herramientas tecnológicas, como videos y simuladores, para poder realizar las prácticas que hoy no se pueden llevar a cabo de manera física.
No obstante, Christopher Garduño también forma parte del modelo dual, donde ha podido aplicar lo aprendido en la universidad en un taller mecánico y adquirir la práctica que no ha tenido la oportunidad de hacerlo en la escuela.
El joven universitario ha prestado servicios en el Taller Mecánico All Service Automotriz y en Servicio Eléctrico Becerra, pequeños talleres donde labora gente muy experimentada que han brindado la oportunidad a los jóvenes estudiantes para que puedan realizar sus prácticas.
“Con ellos se presta mucho a que nos brinden toda la información que sea posible, a solucionarnos dudas y yo les agradezco mucho por darnos la oportunidad de estar ahí”.
En el taller eléctrico trabajaba con computadores, sensores, checar líneas en los carros, alternadores, marchas que eran el “pan de cada día”, realizando pruebas, arreglarlos, volver a montar y echar a andar.
Por otra parte, en el taller mecánico ha tenido la oportunidad de trabajar con motores, ahí realiza afinaciones, servicio de frenos, armado del motor de camionetas, bajar transmisiones, entre otros servicios.
“Es una gran ventaja estar tanto en la escuela como en el taller”, sostiene Christopher, quien asegura que, a diferencia de muchos de sus amigos mecánicos, quienes han adquirido conocimientos en cinco años, él, gracias a la UTEQ y el modelo dual, tiene la ventaja de desarrollar más conocimiento en menor tiempo y así tener la misma capacidad que alguien más experimentado.
“En cuanto termine mi TSU planeo continuar con mi ingeniería en el Área de Metalmecánica que es la que ofrece la escuela”, señala Christopher Garduño, quien busca seguir adquiriendo experiencia en distintas áreas de motores y vehículos para después abrir un taller propio en un futuro.
“LA EXPERIENCIA QUE BRINDA LA UTEQ Y LA EMPRESA ES INVALUABLE”: JAIME AGUILAR
Después de estudiar una licenciatura y no obtener trabajo, Jaime Mauricio Aguilar Cruz decidió matricularse en la UTEQ, lugar que hoy le permite no sólo estudiar una segunda carrera, sino también tener la oportunidad de adquirir experiencia en la industria.
Como licenciado en Geografía Ambiental egresado de la Universidad Autónoma de Querétaro no obtuvo empleo, situación que lo motivó a prepararse como TSU en Procesos Industriales en el Área de Manufactura, en un ramo que tuviera más oportunidades de trabajo.
“He tenido varios conocidos que me han dicho que el nivel de la UTEQ ha crecido muchísimo”, dijo Jaime Aguilar, quien sostiene que lo que más le gusta de la UTEQ es la visión integral que tiene la universidad, tanto en lo profesional, educacional y a nivel personal.
“Esas variables y esa conjunción de cosas me gustó. También me gustó el sistema académico, las instalaciones y los profesores, quienes han trabajado en el ramo y por lo tanto tienen muchísima experiencia, nos dan consejos y sugerencias”.
Actualmente se encuentra en realizando sus estadías y Modelo Dual en Kostal, ubicada en el Parque Industrial Querétaro, empresa que se estableció en la entidad a finales de los años setenta.
Aquí ha sido asignado al departamento de Almacén y Logística, donde empezó desde abajo como ayudante, pero poco a poco lo fueron llevando hasta tener una noción completa de los procesos y líneas de ensamble.
“Gracias a que empecé de ayudante ya conozco mejor el almacén y ahora ya puedo hacer más cosas”, reconoce el joven universitario, quien afirma que lo aprendido en la universidad le ha servido mucho para desarrollar proyectos de clasificación de material, stock, líneas de producción, entre otras tareas.
“Lo que tiene la UTEQ es que te da cuatro meses para que vayas a aprender y seas una esponja”, apunta el joven universitario, quien a través del modelo dual aprende el sistema de las empresas y la forma en que desarrollan sus procesos.
“La experiencia que brinda la UTEQ y la empresa es invaluable. Ahora tengo muchas ventajas sobre mis compañeros que sólo están estudiando”.
Subraya que desde ahora está haciendo los méritos para que Kostal se fije en su perfil y, al momento de obtener el TSU, pueda tener una posibilidad de trabajo y convertirse en un profesional exitoso.