Los daños por las inundaciones en Querétaro, no “encharcamientos” ni “escurrimientos” como quieren acostumbrar o hacer creer desde la narrativa oficial, llegaron a su mayoría de edad en los gobiernos del PAN (2003-2021), con una historia cíclica, actores políticos que permanecen en la élite del poder, datos y hechos que pareciera nos remiten a un déjá vú.
Igual que en 2003, cuando Ignacio Loyola Vera estaba por terminar su sexenio y entregar la estafeta a otro militante del PAN (Francisco Garrido Patrón), el “tocayo” de este último pero con apellidos Domínguez Servién terminó su periodo como mandatario bajo torrenciales lluvias, tormentas, inundaciones y afectaciones en decenas de viviendas en la capital, que evidenciaron la carencia de una infraestructura pluvial adecuada.
Dieciocho años después, cual si fuera ciudadana o mayor de edad, la historia de las lluvias en Querétaro volvió a ocasionar la palabra desastre. Las inundaciones de septiembre de 2021 en la capital, y la ausencia del alcalde por estar de viaje en el extranjero, también hicieron evocar al 2003.
Si Rolando García Ortiz se encontraba en París en septiembre de 2003, Luis Bernardo Nava Guerrero, alcalde –también del PAN– en funciones en septiembre de 2021, andaba en una “gira” por Washington mientras la ciudad y sus habitantes sufrían por inundaciones.
Aunque ambos regresaron a México en su respectivo momento, aún es fecha que no se sabe la utilidad que tuvieron sus viajes al extranjero (si la conoce y justifica, le encargo que ayude a esclarecer el panorama al autor de estas líneas, por favor).
Los apellidos García Pérez tienen vínculo político directo con la capital del estado. Pero no me refiero a 2021, sino a enero-septiembre 2003. El protagonista es la misma persona: Arturo Maximiliano. Secretario del Ayuntamiento con el gobierno de Rolando García (PAN) en 2003, dieciocho años después fue candidato a la Presidencia Municipal de Querétaro bajo las siglas de Morena.
Inicios de octubre. El gobernador que acaba de iniciar su sexenio recorre zonas y municipios con afectaciones por culpa de las inundaciones. Lo acompañan funcionarios, algunos jóvenes del gabinete, y las fotografías salen en medios.
No me refiero a Mauricio Kuri y el 2021, sino a Francisco Garrido en 2003. Ahí está en las imágenes Ricardo Anaya Cortés, el secretario particular. Ahora, con diputaciones local y federal, un periodo al frente de la dirigencia nacional panista y una candidatura presencial después, su trayectoria política avanzó en 18 años. Pero Querétaro se sigue inundando.
Los apellidos Rangel Méndez se encuentran en el gabinete. ¿2021?… También, pero primero 2003. Secretario adjunto de Garrido Patrón, el joven militante del PAN comienza una trayectoria política que después lo llevará a dos diputaciones locales (LVI y LVIII Legislaturas) y ahora es el titular de la Secretaría de Planeación y Participación Ciudadana.
El Partido Acción Nacional (PAN) en Querétaro no es el único instituto político que muestra la falta de apertura, que se refleja en permanencia o escasa rotación de las élites.
Octubre de 2003. En la instalación y primeros días de la LIV Legislatura del Estado, aparece el nombre de José Luis Aguilera Rico como representante por Convergencia.
Octubre de 2021. Ha sido diputado federal, diputado local por segunda ocasión, regidor por otro partido político (Movimiento Ciudadano) y rindió protesta como regidor por el PAN el 1 de octubre. También fue secretario del Trabajo la mitad del sexenio de FDS.
Veamos otros partidos. En octubre de 2003, la misma LIV Legislatura mostraba a Hugo Cabrera Ruiz como diputado por el PRI. Hasta mediados de septiembre de 2021, casi 18 después, era integrante del Poder Legislativo local otra vez, y ha sido diputado federal y regidor. Cinco Legislaturas después (LIX), Hugo Cabrera Ruiz fue coordinador de bancada.
El déjà vu político en Querétaro.
Problemas de inundaciones al menos desde 1991
La hemeroteca personal del escritor Daniel Muñoz Vega da cuenta que las inundaciones causan estragos en las calles de capital por lo menos desde 1991. Así lo mostró en Twitter.
En la portada del “Noticias” del 19 de junio de ese año queda constancia de las calles anegadas a causa del “aguacero”, mientras que en interiores del periódico se leen nombres de políticos del PRI de entonces: Enrique Burgos García, candidato a la gubernatura, y Andrés Garrido del Toral (QEPD), en vida colaborador de esta casa editorial.
Durante los 30 años que han pasado desde 1991, mínimo otras siete ocasiones ha quedado evidencia de los daños y, en algunos casos, las pérdidas humanas causadas por las lluvias y las inundaciones. Primero fue septiembre de 2003, cuando la delegación Felipe Carrillo Puerto y sus avenidas quedaron difíciles de transitar.
Municipio de Corregidora. Tarde del 30 de septiembre de 2006. Una torrencial lluvia provocó el desbordamiento de parte del río El Pueblito. Viviendas en Santa Bárbara fueron afectadas con más de 80 centímetros del nivel del agua. Con este panorama y afectaciones, Germán Borja García rindió protesta como alcalde el 1 de octubre.
En 2014, las lluvias arrastraron y se llevaron hasta la narrativa y el discurso oficial del entonces alcalde Roberto Loyola Vera. Las “mil obras” quedaron en el suelo, cuando junio y agosto (dos veces) mostraron que no habían resuelto las fallas en la infraestructura pluvial.
Tres años después, el 27 de septiembre de 2017, las torrenciales lluvias en la capital provocaron que se reblandeciera el asfalto –una vez más– y se abriera la calle atrás del centro comercial Antea, sobre el camino al pueblo de Jurica. Los pasajeros y el chofer de una unidad de transporte que circulaban ante el diluvio padecieron las consecuencias.
Cuatro años después, a unas horas del cambio de administración, el Centro Histórico de Querétaro volvió a colapsar con los aguaceros. Esquina de Juárez con Zaragoza, avenida Ezequiel Montes, colonia El Retablo y calles como Arteaga sufren la falta, 18 años después, de una planeación urbana y obras que amortigüen lluvias “atípicas” en el discurso oficial.
Similitudes 2003-2021 van más allá de la política y lo pluvial
Torneo de Apertura. El jugador que porta la playera con el número 10 de Tigres es extranjero y su apellido empieza con G. Destaca por la fuerza en sus tiros de larga distancia y calidad futbolística. Llegó a México para rubricar goles.
El equipo de futbol Gallos Blancos ocupa el último lugar de la tabla del torneo. El director técnico es mexicano y con pasado como jugador insignia de un plantel. Su primera oportunidad de dirigir en el Máximo Circuito.
Si usted pensó en septiembre de 2021, pareciera… pero no. Walter Gaitán, argentino de nacimiento, porta el “10” en el dorsal de los Tigres de la Autónoma de Nuevo León, artífice de la goleada y humillación al son de 7-1 a los “Gallos Blancos” de Octavio Mora, que ocupan el último lugar del Apertura 2003.
Dieciocho años después, André Pierre Gignac y Héctor Altamirano ocupan los roles de Gaitán y Mora en 2003. Las similitudes del Querétaro también alcanzan al futbol.
Seis trienios, decenas de cambios de uso de suelo: consecuencias visibles
Han pasado seis trienios en los Ayuntamientos de Querétaro, Corregidora y El Marqués. 2003, 2006, 2009, 2012, 2015 y 2018 son los años en que regidores y regidoras de distintos partidos políticos han hecho cientos de cambios de uso de suelo en polémicas sesiones de Cabildo; es el saldo o historial de estos tres Ayuntamientos.
Las consecuencias se observan y padecen con las lluvias. Es momento que la sociedad organizada exija y orille tanto a las administraciones estatal como a los Municipios, a entrarle de lleno para resolver el problema de infraestructura pluvial.
