La risa es considerada una forma de comunicación ya que a través de ella manifestamos nuestras emociones. Cuando reímos, el cuerpo produce hormonas conocidas como las hormonas de la felicidad pues se ha demostrado que al reír se producen sustancias que contribuyen al nivel corporal y emocional. Si bien la risa no cura enfermedades, las hace llevaderas y ofrece amplios beneficios tanto físicos, como psicológicos y sociales.De hecho, la risa se usa como terapia alternativa y se le conoce como risoterapia o la terapia de la risa.
Curiosamente, la palabra risoterapia no se encuentra en el diccionario de la Real Academia Española; sin embargo, podemos encontrar su significado en textos enfocados en la salud. Para Rojo de la Torre (2016) “La risoterapia es definida como una técnica psicoterapéutica complementaria basada principalmente en conseguir beneficios a nivel somático y emocional a través del fomento de la risa”.Psiguide (2021) la define como “[…]una estrategia para hacer reír a las personas mediante diversas actividades tal es el caso de juegos, dramatizaciones, danzas, expresiones corporales o por el simple contagio de la risa”.
La terapia de la risa tomó notabilidad a partir de la película Patch Adams; sin embargo, en la Edad Media ya existían “bufones” para hacer reír a burgueses y monarcas y en las culturas ancestrales un hechicero maquillado usaba la risa para curar a los guerreros enfermos. En el imperio chino también se practicaba la risa para mejorar la salud (Rojo de la Torre, 2016). Adelantando el tiempo, en 1990 María Cruz García fundó la primera escuela de risoterapia a nivel internacional.
Por años, la risa se ha empleado para afrontar enfermedades. Estudios actuales muestran los beneficios. En el área justamente de la salud la lista es grande; por ejemplo, fortalece el sistema inmunológico,aumenta la oxigenación en los pulmones y la circulación sanguínea, mejora la digestión, disminuye la percepción del dolor, combate el insomnioy, de acuerdo con Rojo de la Torre (2016) “[…]la vibración que produce la risa en la cara limpia y despeja la nariz y los oídos, mejorando el olfato y la audición”.
Respecto a los beneficios psicológicos, disminuye el estrés, la ansiedad, la depresión, los pensamientos negativos y aumenta la serenidad, la autoestima y la creatividad, distrae de preocupaciones, ayuda a afrontar positivamente los problemas cotidianos y potencia las capacidades intelectuales. En lo social, mejora la comunicación, fomenta la confianza, estrecha las relaciones afectivas, disminuye el miedo al ridículo, refuerza los sentimientos de pertenencia, proximidad, amistad y amor, predispone a la cooperación, la solidaridad y ayuda a la cohesión social.
Estemos o no afrontando una situación desagradable, podríamos recurrir a la terapia de la risa como alternativa para mejorar nuestra calidad de vida. Quizás, ver películas de comedia, memes en video, juegos, bailar, contar chistes, y todo aquello que disfrutemos y nos haga reír.
La Mtra. Jhaneffer Ortega Alcántara es profesora de la Escuela de Humanidades y Educación, Tecnológico de Monterrey Campus Querétaro. jortegaa@tec.mx
Fuentes citadas:
Psiguide. (2021). Risoterapia: El poder curativo de la risa y el buen humor. Psicólogos Bogotá. Recuperado de https://www.psicologosbogota.com/psicologia/risoterapia-el-poder-curativo-de-la-risa-y-el-buen-humor/
Rojo de la Torre, S. (2016, junio 13). Risoterapia y Bienestar. Universidad de Jaén. Recuperado de https://hdl.handle.net/10953.1/3575