REPORTAJE Y EDICIÓN FOTOGRÁFICA: AMÍLCAR SALAZAR/LALUPA.MX
–Atrápame si puedes –pudo haber dicho a la justicia el fugitivo estadounidense Tyler Adams, quien hace cinco meses cruzó la frontera mexicana para presuntamente matar a su ex pareja sentimental (Racquel Sabean, de 41 años) y secuestrar a la hija de ambos (Valentina, de siete meses) para llevársela a vivir con otra mujer.
Pese a que Adams fue detenido por la policía de Tecate, Baja California, la fiscalía estatal descartó fincarle acusaciones, ello porque, según dijo, el extranjero era “requerido por la justicia de Estados Unidos”, razón por la que decidió entregarlo al Instituto Nacional de Migración (INM) a fin de que fuera deportado a su país.
Pero algo extraño –un supuesto “error” burocrático– ocurrió durante el traslado internacional de Adams, dado que el presunto feminicida pudo pasar libremente por la garita de Tijuana con dirección a San Ysidro y marcharse caminando, luego de burlar con documentos falsos tanto al personal del INM como al del US Customs and Border Protection (CBP).
“LO TENÍAN, LO DEJARON IR”
Los detalles de la insólita liberación del prófugo se desconocen, porque las autoridades de ambos países sólo coincidieron por sus respectivas contradicciones.
Según la Fiscalía de Baja California, Adams –quien decía llamarse “Paul W. Philips”– fue entregado al CBP por parte del INM. Sin embargo, el FBI dijo que el sujeto estaba libre y cruzó de regreso a EU usando el alias de “Aarón Lee Bain”.
“Claramente, algo salió mal en la transferencia… pero ahora el enfoque debe ser detenerlo”, se concretó a decir William McNamara, vocero del Federal Bureau of Investigation (FBI).
“No puedo creer esto… lo dejaron ir”, escribió en las redes sociales el hermano de la mujer asesinada, David Sabean, mientras que el padre de éste, con nombre similar, también expresó sorpresa y enfado al enterarse del misterioso escape de Adams:
“El agente de Aduanas que lo perdió debería estar avergonzado, la policía de EU debería estar avergonzada. Al menos la policía mexicana lo persiguió y encontró, aunque por desgracia después lo soltó sin tomar precauciones. ¿Acaso todos trabajan para el club de Mickey Mouse? ¿Las autoridades nos tratan como niños, nos toman el pelo?”
DEFRAUDADOR SERIAL Y “MAESTRO DEL DISFRAZ”
De acuerdo con el agente McNamara, Adams es un camaleón humano de 51 años que comete delitos financieros desde que era un adolescente, aprovechando su habilidad para camuflarse en al menos 16 identidades.
“Es un maestro del disfraz”, dijo el investigador después de revelar el historial delictivo del prófugo y advertir a la comunidad sobre el riesgo de topárselo en algún lugar: “Se le busca en relación con un homicidio sin resolver en México, así que… sí, debería ser considerado peligroso”.
FEMINICIDA OCULTÓ EL CUERPO EN UN ATAÚD DE PVC
El 17 de abril de 2022, a bordo de un auto Jetta 2008 propiedad de su familia, Racquel Sabean viajó de San Diego a Tijuana en compañía de la niña Valentina y del propio Adams, a quien aparentemente sólo conocía bajo el seudónimo de “Paul Phillips”, mismo que solía utilizar en México.
La mujer llegó a Tijuana quizá con la idea de afirmar su relación con el supuesto Phillips, sin imaginar que con su muerte se sumaría a la tragedia de una entidad que ocupa el tercer lugar nacional en homicidios de mujeres, con 69 casos sólo en el primer trimestre de 2022, según cifras oficiales.
Adams residía en San Diego pero rentaba un apartamento sobre la calle Del Cantil, en la vistosa sección Jardines del fraccionamiento Playas de Tijuana, espacio donde solía hospedarse Racquel cuando lo visitaba o cuando juntos acudían ahí para tomarse vacaciones.
En fecha desconocida, presumiblemente a pocos días de haber cruzado la frontera, Adams habría ejecutado a Racquel rompiéndole el cuello con una maniobra que pudo aprender durante su juventud, cuando hizo el servicio militar con los US Marines de San Diego.
El feminicida empaquetó el cadáver dentro de una nevera grande y alargada, una especie de ataúd de PVC, el cual cubrió con una manta y acomodó entre el respaldo delantero y el asiento trasero del auto Jetta de Racquel.
Un vehículo que permanecería estacionado sobre la apacible calle Del Cantil durante al menos 30 días, hasta que la tarde del 31 de mayo un nauseabundo olor en el vecindario propició el hallazgo.
Para entonces, “Phillips” ya había abandonado el apartamento tijuanense y residía (quizá con otro alias) en el municipio de Tecate, donde 15 días después sería atrapado por la policía municipal.
VALENTINA A SALVO CON SUS ABUELOS
Cuando la fiscalía tuvo bajo custodia a Adams, éste dijo que Valentina estaba a salvo “con su novia” en un domicilio del municipio de Playas de Rosarito, donde efectivamente fue encontrada.
La mujer que cuidaba a la menor no fue identificada y, según el fiscal Ricardo Iván Carpio Sánchez, se trataba de una niñera que no tenía intención de hacerle daño y desconocía que estuviera en su casa sin el conocimiento de su madre biológica.
“Esa otra mujer nos dijo que tenía que cuidar al bebé porque el padre del bebé (Paul Philips) se lo pidió”, explicó el funcionario.
Valentina Sabean fue devuelta a EU y entregada al área de Bienestar Infantil del condado de San Diego, donde días después fue dada en custodia a los abuelos.
DE EXITOSA CAPTURA A FIASCO JUDICIAL
Si bien Adams fue detenido el 15 de junio –debido a que cruzó el arco de seguridad de una carretera a bordo de un auto cuyas placas estaban reportadas–, el éxito de la captura pronto se transformaría en un fiasco judicial.
La Fiscalía bajacaliforniana dijo que el estadounidense proporcionó información positiva sobre el paradero de la niña Valentina, pero en el caso del feminicidio de Raquel “no cooperó”. Dicha circunstancia habría influido en la autoridad para tomar la decisión de deportarlo a su país.
Aunque el INM no dio explicaciones a la prensa sobre el extraño escape de Adams, una versión obtenida por lalupa.mx sugiere que los agentes migratorios habrían entregado al sospechoso en la aduana de EU, pero sin acompañarse de la documentación policial sobre los presuntos delitos cometidos en territorio nacional.
Lo anterior habría causado que al momento de recibir a Adams los agentes del CBP no contaran con elementos jurídicos para impedirle el ingreso a California, menos aún cuando el hombre se habría identificado como el ciudadano estadounidense “Aarón Lee Bain”.
Este medio también recabó la hipótesis de un eventual retraso por parte del FBI, bajo el supuesto de que el informe sobre los antecedentes del fugitivo se habría demorado al menos ocho horas en llegar al conocimiento del personal de la garita San Ysidro-Tijuana.
Cuando los agentes del CBP supieron que habían dejado pasar a un fugitivo, este ya podría haber subido al popular tranvía de San Diego o haber regresado a México, tal y como suponen familiares de la víctima.
Adams solía cruzar la garita Tijuana-San Ysidro repetidamente y por ambos sentidos, como si fuera puerta giratoria, siempre presentando papeles falsos a los agentes aduaneros: ante los mexicanos se apellidaba Phillips y con los de casa era Blain.
MISTERIOSOS GOLPES EN LA CARA
Sin contar con un marco legal para detener al presunto feminicida, los oficiales de la aduana de EU pudieron haberse topado con la astucia de Adams, quien –de acuerdo con otra hipótesis recabada por el reportero– les habría dicho que acababa de ser víctima de una supuesta arbitrariedad y… golpiza por parte de policías de Baja California.
Las hinchazones que el tal ciudadano “Aarón Bain” mostraba en los pómulos pudieron darle credibilidad ante los aduaneros, razón por la que habrían accedido a darle el paso libre a su país.
En fuentes de prensa de Baja California también causó extrañeza que las fotografías policiales de Adams (aparentemente tomadas en Tecate) este aparece con una camisa amarilla que se aprecia como recién sacada de su empaque, situación inusual en la mayoría de los casos de detenidos.
Indagando sobre las marcas en los pómulos, una televisora de San Diego difundió un documento que revela que hacia 2012 Adams se sometió a una cirugía plástica con implantes faciales, misma que “no resultó afortunada”, situación que podría explicar las huellas que hasta ahora no habrían desaparecido.
Paralelamente, Donald Chaffee, padrastro de Adams, afirmó a un medio de California que Adams “siempre amó las cirugías plásticas” y que a él le consta que siendo muy joven el sujeto se practicó una cirugía en la nariz. “Cambiarse el rostro le obsesionaba”, afirmó.
Sobre las marcas en los pómulos de Adams, el agente del FBI William McNamara dejó abiertas todas las hipótesis:
“Ya sea que haya estado o no en algún altercado físico, ya sea un intento físico intencional de alterar su apariencia, ya sea algún tipo de inyección o cirugía… no lo sabemos. Pero claramente eso parece ser hinchazón alrededor de los ojos o la cara. Se nota”.
PRÓFUGO “PODRÍA ESTAR EN MEXICO”: FAMILIA DE RACQUEL
El padre de Racquel, David Sabean, dice a lalupa.mx no tener suficiente información para entender cómo fue que las autoridades de dos países permitieron que el presunto feminicida pudiera escabullirse.
“Cuando me enteré de que Phillips había escapado, no podía creerlo. Me parece que fue pura incompetencia. Sigo sin entender cómo pudo escapar con tanta policía involucrada”, añade.
“Lo que sí sé es que (Adams) tiene enorme inteligencia para la perversidad: si le falta dinero, sabe conseguirlo; estafando, robando y ya vemos que también matando”, apunta el padre de la víctima, quien responde a preguntas enviadas por el reportero a través de una red social.
También cuestionada por este portal de noticias, Denise Hosking, madre de Racquel, dice haberse sorprendido al enterarse que el novio de su difunta hija y padre de su nieta se llama “Tyler Adams”, ya que “todos en la familia lo conocíamos como Paul Phillips.”
De acuerdo con Denise, su hija conoció al supuesto Phillips a mediados de 2020, aun cuando ella también perteneció a la Marina de San Diego. “Fue una coincidencia, y aunque no se conocieron cuando fueron marines, eso mismo pudo marcar el inicio de su relación”.
La madre de Racquel comenta que la pareja empezó a tener problemas, y sin separarse del todo, comenzaron a verse con mayor distancia.
“Mi hija me había dicho que no pensaba seguir su relación con Paul, pero sucedió el embarazo y el nacimiento de Valentina y eso los unió recientemente, según pude percibir”.
La madre de Racquel da por supuesto que Adams podría estar escondido en un lugar apartado de EU, aunque también “podría haber vuelto a México”, donde, según supo en su momento, el ahora fugitivo “tiene muchos amigos”.
La creencia de Denise coincide con los dichos a la prensa del agente McNamara del FBI, sobre la posibilidad de que Adams pudiera estar en México, donde le resultaría sencillo mimetizarse entre la comunidad estadounidense que reside en Baja California o en estados como Querétaro, Guanajuato, Jalisco o Quintana Roo, entre otros.
Para mayor ventaja, Adams sabe cambiar de alias como de camisa: Aarón Lee Bain, Paul Wilson Phillips, David Smith, Dominic Braun, Kevin Schoolcraft, Kevin Kennedy, Michael Whittman, Lance Irwin, Brice Johnson, Matthew Kashani, Taylor Chase y Joshua Smith son algunas de sus falsas identidades.
Para colmo, el nombre oficial de “Tyler Adams” es otro alias: el mismo que 20 años atrás adoptó legalmente, cuando decidió guardar en el cajón del olvido su acta de nacimiento en la que figura como “Kevin Michael Schoolcraft”.
30 AÑOS PREVIOS COMO “CAMALEÓN”
Por algo habrá sido que Adams decidió inventarse un nuevo nombre desde la juventud: su primer delito fue estafar a su propia madre y al padrastro, quienes terminaron por demandarlo y meterlo por primera vez a prisión.
Según registros judiciales, el joven Adams robó las identidades de sus padres y las utilizó para pedir préstamos bancarios y adquirir cinco propiedades en San Diego.
“Eran propiedades frente al mar y muy caras, nos arruinó la vida”, dijo el padrastro, Donald Chaffee, a un juez de California, quien sentenciaría al precoz estafador a 14 años de cárcel.
Prometiendo “acudir a terapia”, Adams pudo salir adelantadamente de su encierro, aunque la promesa fue sólo para retomar una carrera delictiva que duró 30 años y ejerció en varios estados del país, especialmente en Hawaii, antes de volver a San Diego y entrar en contacto con las playas de Tijuana.
Justamente en la citada isla del Pacífico –tras ser apresado por fraude bancario–, Adams se percató de que ya había ganado fama como “camaleón” entre sus compañeros de celda. Un testigo afirmó a una revista que el estafador “se emocionó bastante” y los llenó de anécdotas.
Twitter: @amilcarsalazara
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