Es preocupante una parte de la declaración realizada este domingo por la presidenta del Partido Acción Nacional (PAN) en Querétaro, quien amenazó abiertamente a los que se atrevan a “politizar” la obra de la avenida 5 de Febrero que realiza el gobierno del estado.
La lideresa del blanquiazul advirtió que “el comité estatal del PAN vigilará con lupa y señalará con toda puntualidad a las personas o grupos que busquen politizar la obra Paseo 5 de Febrero”.
También pidió a los ciudadanos “… no se dejen engañar, usar, ni mal informar por seudolíderes que es común que aparezcan en este tipo de obras y que lo único que buscan es utilizar a la gente para sus fines e intereses políticos”.
El remate, en el mismo tono: el PAN “estará muy pendiente y vigilante de que no surjan personas o grupos con intereses particulares que busquen politizar, desinformar y generar choque en torno a la obra Paseo 5 de Febrero…”.
Mejor calladitos
Si una conclusión puedo sacar es que para la panista sería mucho mejor que la gente no opinara sobre esta obra a menos que sea de manera favorable o positiva, porque si critica y al PAN o al gobierno no le gusta tal opinión seguramente esta será calificada de intento de “politizar”.
En consecuencia, quienes incurran en esta “falta” serán señalados por el dedo flamígero, supongo que para denunciarlos o atacarlos con la intención de hacer justicia. Claro, la justicia desde el punto de vista de la lideresa partidista.
Deja en claro el compromiso de vigilar (¿y evitar?) que surjan personas o grupos que quieran politizar la obra. Yo pregunto: ¿Cómo? ¿Con qué instrumentos? ¿Con qué autoridad lo hará?
Y para finiquitar el juicio sumario, se pide a la gente que no se deje engañar por líderes que no son líderes sino (supongo nuevamente) personas que quieren “politizar” la obra y usan a la gente para sus fines personales o políticos.
La política, dice la Real Academia de la Lengua en una de su docena de acepciones, es la “actividad del ciudadano cuando interviene en los asuntos públicos con su opinión, con su voto, o de cualquier otro modo”.
La misma fuente refiere que politizar es “dar orientación o contenido político a acciones, pensamientos, etc., que, corrientemente, no lo tienen” e “inculcar a alguien una formación o conciencia política”.
Entiendo, entonces, que la presidenta del PAN en Querétaro lo que quiere es que la gente no adquiera una conciencia política, que no intervenga en los asuntos públicos y tampoco quiere que le den un contenido político a acciones que regularmente no lo tienen (aunque excepcionalmente sí lo tienen, como las políticas públicas gubernamentales).
Esta lógica nos conduce a suponer, entonces, que la presidenta de dicho partido político preferiría que aplique el principio de que “calladito te ves más bonito”.
Cuidado con la tentaciones
El gobierno de China mantiene la prohibición, en todo su territorio, de usar Twitter y por eso lo tiene bloqueado; ningún chino tiene acceso a él. Así, el gobierno del país evita que las críticas se difundan masivamente.
Por su parte, el gobierno nicaragüense ha atacado a los medios de comunicación. Ha encarcelado a periodistas e, incluso, tomado las instalaciones de medios que son críticos al sistema. De esta manera, la crítica se minimiza e incluso se aplasta.
La tentación de todo régimen mayoritario (incluyéndose al gobierno federal mexicano) es la de incurrir en la imposición y en el control total de la vida pública para de ahí pasar a la persecución, como ahora lo propone la panista.
Uno solo
En lugar de estas expresiones, habría sido mejor publicar sólo un párrafo de su comunicado de prensa.
Ese en el que se apunta que “… la ciudadanía sepa que existen los canales formales y directos con gobierno del estado para plantear sus legítimas inquietudes que generará esta obra…”, a pesar de que a ella no le corresponda, como presidenta de un partido, comprometer acciones del gobierno establecido… a menos que estemos en China.
