HISTORIA: PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ/LALUPA.MX
Una página para poner en línea las artesanías de mujeres de Amealco, así como proyectos educativos y culturales en Querétaro y Guanajuato, le valieron a Lorena Real Fonseca el Premio de la Juventud 2022 por Trayectoria Académica, convencida de que los jóvenes requieren de apoyos para transformarlo todo.
Originaria de Amealco, Lorena se dio cuenta de los daños económicos de la pandemia a las artesanas indígenas porque la gente no podía visitar las comunidades. Entonces, decidió trabajar en “Endomia”, una palabra otomí para referirse a la esperanza que llevó todas las artesanías a las redes sociales y una página web.
Su trabajo buscaba empoderar a diez mujeres artesanas, que podían vender sus productos en línea. Aunque la página ya no está activa por las actividades de Lorena, el proyecto le valió una de las 100 becas Rise, una de las más grandes del mundo, que consiste en ayuda para todo su periodo en la universidad que acredite, un viaje todo pagado a Sudáfrica, apoyo en tecnología, asesorías y teorías, así como servicios de salud.
“Todo fue a través de un proceso muy largo de un año donde estuve haciendo el proyecto de innovación social. Se llama Endomia, porque soy de una comunidad rural ubicada en Amealco, al sur de Querétaro, ahí se hacen las famosas muñecas Lele y estuve analizando qué les afectaba más y era la economía, así que ayudé a introducir las artesanías de las mujeres indígenas al mercado en línea”.
La página estuvo vigente durante 2021 y tenía la intención de dar una esperanza económica a las familias indígenas de Amealco. El proyecto no fue el único que le valió la beca de Rise, porque cuenta con una serie de actividades de involucramiento social.
Entre esos proyectos, se encuentra un modelo de educación para una primaria en San Luis de la Paz, en Guanajuato, “también en ámbitos de cultura, estuve en un grupo de danza, trabajo en equipo y colaborativo y me gusta estar en contacto con personas para aprender de ellos”.
A punto de terminar la preparatoria, Lorena quiere prepararse en el área de Negocios, así que le gustaría cursar la universidad en Canadá, porque “estar en contacto con más personas, con una nueva cultura y un nuevo idioma, te hace ver diferente al mundo”.
Su idea es conocer otros proyectos para regresar a su comunidad y ofrecer soluciones a la gente de Querétaro. Por eso, su familia apoya cada paso que da en favor de su propia formación para que pueda ayudar a otras personas, sobre todo en Amealco, “que tiene mucho que aportar a Querétaro, más que el turismo y las muñecas Lele, que aquí se fabrican, pero aquí también están las mujeres trabajadoras y tenemos mucho qué aportar”.
El futuro de Amealco y Querétaro, señala, depende de los jóvenes y de que estén dispuestos a buscar todos los caminos, así que requieren apoyos a partir de lo que ellos quieren. “Lo más importante es que los jóvenes nos atrevamos y no tengamos miedo a intentarlo, no se trata de que compares tu proceso con el de otras personas, es muy importante estar enfocado para saber qué quieres y trabajar desde ahí, atreverse e intentarlo”.
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