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Gerardo Aguilar: el reto y el placer de fotografiar aves, “esos pequeños guerreros”

ENTREVISTA: LUCERO ALMANZA ESCALANTE/LALUPA.MX

San Juan del Río, Qro.- Fuerte y enigmático, así es el colibrí, un ave que puede llegar a ser la más pequeña del mundo, con sólo 5 gramos de peso. Con una capacidad de aletear hasta 80 veces por segundo y alcanzar una sorprendente velocidad de 120 kilómetros por hora, es, sin embargo, considerado “un ave guerrera”, el símbolo de Huitzilopochtli —dios de la guerra de los mexicas—, y es precisamente ese enigma lo que busca Gerardo Aguilar Anzures captar en sus imágenes, lo que le atrae y le cautiva.

Las aves pueden parecer especies vulnerables y delicadas, pero en su ser tienen una fuerza y una belleza que ha encantado a este fotógrafo mexicano, colaborador de lalupa.mx, quien desde 2014 se ha dedicado a la fotografía de naturaleza, principalmente a las imágenes de aves.

En una plática con este portal de noticias, Aguilar nos comenta su historia como fotógrafo profesional, además de su labor como activista y promotor de la conservación del medio ambiente. Un trabajo con el que está comprometido y que ha impulsado a través de su obra.

Entre sus especies de aves preferidas están los colibríes, “los guerreros, un ave muy significativa para nuestras culturas”, afirma, debido a que, para el imperio mexica simbolizaba el dios de la guerra, Huitzilopochtli.

Foto: César Ortiz/lalupa.mx

“Nuestros ancestros, que eran muy sabios, decían que los colibríes eran quienes llevaban los mensajes entre los hombres, eran mensajeros de los sentimientos entre los hombres”, añade.

La guacamaya verde y el quetzal son aves que le impactan al también autor de la columna “A ojo de pájaro” de La Lupa.

Unos quieren ser bomberos, otros fotografiar animales

Gerardo Aguilar es ingeniero en Electrónica de profesión, “pero de pasión soy fotógrafo de naturaleza”, dice.

Si bien estudió y se dedicó a la ingeniería, desde niño tuvo la inquietud, “el sueño”, de dedicarse a la naturaleza.

“Sí me visualizaba de niño haciendo ese tipo de cosas y dibujaba (animales). En algún momento de la vida alguien me convenció de que la naturaleza, la biología, no era una forma de vida exitosa y mejor estudié otro campo”, recuerda.

Sin embargo, con el tiempo, Gerardo comenzó a interesarse más por la fotografía, y si bien en un principio se dedicó a la fotografía de retrato, de paisajes y monumentos, en 2014 comenzó a enfocar su trabajo artístico en el tema de naturaleza.

Foto: César Ortiz/lalupa.mx

Actualmente está dedicado a la fotografía de aves, aunque también toma imágenes de insectos, mariposas y mamíferos en algunos casos.

“De niño, incluso en mi casa pensaban que iba a ser biólogo, al final de cuentas las cosas me llevaron a la ingeniería electrónica, pero siempre he amado la naturaleza y me han llamado la atención los animales; y a partir de 2014, también ocurrió que mi hijo estudia biología y él me atrajo a la observación de aves”, refiere.

Entre las motivaciones que han llevado a Gerardo a fotografiar estas especies, es el deseo de captar la vida animal y mostrarla a las personas. “A diferencia de otros que quieren los trofeos físicos y quieren una cabeza de alce en su pared o un pato disecado, yo amo tener a los animales vivos, en imágenes, mantener esa fuerza vital”, señala.

Como fotógrafo considera que ha avanzado en la calidad de su obra, en su técnica y visión, aunque afirma que en esta actividad todo es “practicar, practicar y practicar”.

Foto: César Ortiz/lalupa.mx

“Sólo se puede proteger y amar lo que se conoce”

Un aspecto muy importante del trabajo de Aguilar es la promoción de la conservación de especies por medio de su obra. En los últimos años ha participado en proyectos como la recuperación del Canal Nacional en la Ciudad de México.

“Poco a poco en este campo me he ido haciendo de un cierto prestigio y eso me ayuda a hacer difusión y trabajar en la conservación de las especies. Por ejemplo, hay un proyecto en la Ciudad de México, que es en el Canal Nacional donde se hizo un rescate en 2018 y ahora prácticamente se partió de cero, se regresó al proceso natural de la repoblación de las especies de aves en el lugar y he registrado ese proceso”, menciona.

La Garza Blanca (Ardea alba) es un especie habitual del Canal Nacional.

De esta forma, ha colaborado con la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México, así como en otras acciones con la Comisión Estatal de la Biodiversidad de Morelos, y es integrante del Consejo de la Comunidad Mexicana de Fotógrafos de Naturaleza.

El objetivo con todo este trabajo, destaca, es impulsar la conservación de especies, difundir y compartir esa pasión por la naturaleza y contagiar a la gente.

Foto: César Ortiz/lalupa.mx

“Fotos de naturaleza y fotos de aves hay muchas; hay una proliferación de imágenes, y más a través del internet, pero yo trato de que la foto transmita, que sea un momento importante, que sea una pose interesante, una luz que incida y que nos permita ver el carácter del animal, cómo está integrado a su entorno, qué tan bello es”, expone Aguilar.

“El mensaje es ese: apasiónate, disfrútalo, conócelo, porque sólo se puede proteger y amar lo que se conoce, lo que se conserva y cuida”, puntualiza.

Como parte de esa labor de difusión, durante conferencias y presentaciones, Gerardo también transmite mensajes sobre el cuidado del medio ambiente, de la importancia de no tirar basura, respetar los ecosistemas, evitar malas prácticas, ser dueños de mascotas responsables, etcétera.

Respecto a la recepción de la gente, considera que se puede influir en las personas, dentro de su rango de acción, y eso es un aspecto importante.

Foto: César Ortiz/lalupa.mx

El reto de la fotografía de naturaleza

Aguilar reconoce el desafío y la dificultad que implica hacer fotografía de naturaleza, debido a que se trata de captar la imagen de seres que no pretenden posar, que no esperan a que se haga una toma, o con los que se pueda repetir en caso de que falle.

“Es una combinación entre paciencia, mucha paciencia, mucha resistencia a la frustración de que hay veces que el animal te elude. Tienes que estar dispuesto a esperarlos y también tener la velocidad de reacción, el instinto para poder captarlos en el momento”, menciona.

Para esto, agrega el fotógrafo, se debe estudiar la especie que se va a fotografiar, conocer sus hábitos, prevenir rutas o reacciones que puedan tener y que ayude a tomar las imágenes.

“Tienes que conocer el ave, conocer el entorno, las condiciones ambientales de luz, de viento y tener la oportunidad de tiro y la paciencia para esperar el momento adecuado y el reflejo para captarlo”, indica.

La obra de Gerardo incluye especies de México, Costa Rica y California, Estados Unidos.

Foto: César Ortiz/lalupa.mx

Exposición en San Juan del Río

Si quieres admirar el trabajo de Gerardo Aguilar Anzures, esta es tu oportunidad, pues del 21 de abril al 12 de mayo, este artista de la lente presenta la exposición, “Alas y Plumas de México”. La cita es en el ex convento de Santo Domingo, antigua Presidencia Municipal, en San Juan del Río, Querétaro.

Fotos: César Ortiz/lalupa.mx

La exhibición, que se montó con la participación y apoyo de la directora de Cultura del municipio de San Juan del Río, Aleyda Andrés Ibarra, se ubica en el vestíbulo del recinto y cuenta con fichas impresas e información a través de código QR.

Fotos: César Ortiz/lalupa.mx

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Last modified: 26 abril, 2023
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