HISTORIAS: PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ/LALUPA.MX
FOTOS: RICARDO ARELLANO/LALUPA.MX
Las matemáticas son perfectas y son indispensables para toda la vida, coinciden Ricardo Villalobos y Camila Hernández, quienes ganaron medalla de plata y el décimo segundo lugar, respectivamente, en la XXIII edición de la Olimpiada Nacional de Matemáticas.
Los adolescentes se sienten seguros con las matemáticas, confiesan que ya tenían cierto gusto por esta materia, pero se hicieron fuertes a partir de los entrenamientos que recibieron cada sábado en sus escuelas, donde el profesorado de secundaria identificó sus talentos junto al de muchos otros alumnos.
Ricardo Arturo Villalobos Sámano, de 13 años y Camila Berenice Hernández Nieto, de 14, compitieron contra unos 16 mil estudiantes en las etapas estatales y contra 800 niñas, niños y adolescentes de los 24 estados que participaron en la Olimpiada Nacional.
Ambos aprovechan los programas que la Unidad de Servicios para la Educación Básica (USEBEQ) impulsa en sus escuelas para motivar la enseñanza de las matemáticas y ahora solamente piden que se encuentre y apoye a más talentos para acabar con la idea del rechazo a las operaciones y cálculos matemáticos.
Las matemáticas son perfectas
Ricardo Arturo Villalobos Sámano, alumno de primer grado de la secundaria general “Roberto Ruiz Obregón” de San Juan del Río, está convencido de que las matemáticas son parte importante de su vida. Por eso, cada sábado se suma a las clases intensivas de matemáticas y lee distintos libros sobre la materia.
“Desde siempre me han atraído las matemáticas, desde cuarto de primaria me he metido a este tipo de eventos, las matemáticas son perfectas, pueden explicar muchas cosas, son un lenguaje que podemos entender y explicar a nuestro entorno”.
Algunas veces sus compañeros le externan su rechazo a las matemáticas porque las consideran difíciles, pero “no son complejas de entender, solamente hay que ser constante en tus entrenamientos y tener un gusto hacia ellas, porque si no lo tienes es muy difícil que puedas hacer algo”.
Por eso, cree que es necesario que más niños, niñas y adolescentes se involucren más con las matemáticas, que se identifiquen todos los talentos y atraerlos a los entrenamientos para después ir a las competencias. Para eso, hay que acabar con el rechazo a los números y cuentas que se inculca en gran parte del estudiantado.
“Hay que darle prioridad a las matemáticas. Yo quisiera estudiar alguna ingeniería, para eso necesito las matemáticas y hoy me siento feliz, satisfecho con mis resultados y el esfuerzo que hice. Quisiera invitar a todas las personas que sí tienen gusto por las matemáticas que vivan este tipo de competencias, es algo muy bonito”.
Las matemáticas son para toda la vida
Camila Berenice Hernández estudia en la secundaria general “Cerro de las Campanas”, en el municipio de Tequisquiapan, se siente orgullosa de su participación “aunque no tan conforme con el resultado”, pero admite que fue una competencia muy reñida.
“Fue una experiencia muy agradable, una nueva etapa. Desde que iba en tercero de primaria me empezaron a gustar las matemáticas, tengo muchos familiares que son maestros de matemáticas, a mi papá siempre le han gustado y de ellos agarré el gusto”.
Las matemáticas, insiste, son indispensables para toda la vida, “las vamos a ocupar para todo” y aprenderlas significa mejorar en otras materias como la física. “Sí es un poco estresante, hay adrenalina al competir con todo el país, pero me gustan las matemáticas, se me facilitan”.
Sabe que lo más frecuente es que las personas rechacen las matemáticas, porque se les dificulta su aprendizaje, así que sus compañeros suelen pedirle ayuda para mejorar su rendimiento y se dicen felices que Camila los represente en las competencias.
Considera que se necesita más apoyo para los alumnos y para su escuela, porque se requiere presupuesto para continuar con los entrenamientos, además del respaldo de los padres para las niñas y niños que tienen habilidad para las matemáticas.
“Yo quisiera pedirles a todas las personas que, si conocen a un niño, a una niña, con esa habilidad, que los apoyen, porque les esperan muchos conocimientos, muchas experiencias y las matemáticas los van a ayudar, ojalá puedan apoyar causas como estas Olimpiadas y a las escuelas”.
Las secundarias son semilleros de talento
El director de la secundaria general “Cerro de las Campanas”, José Luis Hernández Orozco, se dijo orgulloso de Camila, porque igual que muchos otros alumnos, demuestra su talento para las matemáticas, a partir de las diferentes actividades para promover la enseñanza de esta ciencia.
“Hemos llevado alumnos al Politécnico de la Ciudad de México, en la Olimpiada Pierre Fermat, porque cuatro de nuestros alumnos fueron parte de la selección y en marzo a la ciudad de Puebla, porque una alumna del turno vespertino, representó a Querétaro en la Olimpiada Gau55 y en esta ocasión le tocó a Camila y todos con buenos resultados”.
Hernández Orozco precisó que, si esta secundaria es semillero de diversos talentos matemáticos, es gracias a que los alumnos no están solos en su trabajo para aprender, ya que los maestros identifican el talento y cuentan con ayuda externa para pulirlo.
Esperanza Trenado, académica de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), acude cada sábado a enseñar a los estudiantes desde hace un año. Los trabajos iniciaron con 50 alumnos de los tres años de la secundaria, aunque “se van saliendo algunos porque el entrenamiento es de alto rendimiento y aquí se ejercita la mente y se van quedando los alumnos a los que verdaderamente les gustan y les apasionan las matemáticas”.
Este proceso también implica un esfuerzo de los padres de familia, porque los estudiantes deben acudir cuatro horas cada sábado, un trabajo adicional al que se realiza durante la semana.
Larga trayectoria en matemáticas
Enrique Moreno Vicente, docente de matemáticas en la secundaria “Roberto Ruiz Obregón”, fue una de las personas que identificó el talento de Ricardo desde la primaria y “lo empezamos a involucrar en diferentes Olimpiadas, le ha agarrado mucho el gusto y ha tenido primeros, segundos y terceros lugares estatales y nacionales, tiene un cuarto lugar en una competencia Iberoamericana, el ciclo pasado”.
Se trata del cuarto año en que Ricardo participa en Olimpiadas y para Enrique es un gran orgullo “ver que lo poquito que les ayudamos y orientamos les da este empuje, es contribuir a sus éxitos”.
Enrique es docente de matemáticas desde hace más de 15 años y está convencido que es indispensable aplaudir el esfuerzo de cada estudiante, sobre todo cuando acuden a estos encuentros que son muy reñidos y los ponen a prueba frente a otros alumnos.
“Es una emoción indescriptible ver que, día con día, siguen mejorando, que los estudiantes siguen echándole ganas y cosechando triunfos. Simplemente desde el momento que participan y representan al estado ya los hace ganadores, que traigan reconocimientos y medallas pues lo hace mejor”.
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