Este sábado se confirmó el pronóstico: el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) decidió romper su alianza político – electoral que apenas días antes había comprometido con Morena y el Partido del Trabajo (PT) en Querétaro.
Aunque algunas personas se muestren sorprendidas, en realidad ya venía “cocinándose” prácticamente desde el mismo momento en que se firmó la intención de alianza y mucho antes.
El PVEM siempre tuvo claro que su candidato a la presidencia municipal de Querétaro sería José María Tapia Franco, con Morena, sin Morena… o a pesar de Morena.
Largo historial
La pregunta es ¿Por qué el PVEM está empeñado en que sea este personaje su abanderado a la presidencia municipal?, sobre todo si sabemos que a Tapia Franco “lo persigue” un historial de acusaciones de corrupción, desvío de recursos e irresponsabilidad como funcionario público.
Vale apuntar, sin embargo, que hasta el momento no ha enfrentado a la justicia por ninguna de los referidos señalamientos.
José María Tapia fue militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI) por más de 20 años, periodo durante el cual ocupó cargos destacados en el tricolor y en instancias gubernamentales.
Fue asesor de la presidencia nacional del PRI que encabezó Beatriz Paredes, de 2009 a 2011 además de Secretario de Vinculación con zonas metropolitanas, de 2011 a 2012.
Este último año fue electo senador suplente por el Distrito Federal y en 2018 coordinó en la zona metropolitana la campaña del candidato priista a la Presidencia, José Antonio Meade.
Cuando Enrique Peña Nieto asume la presidencia de la república, en 2012, Tapia es nombrado Director del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), dependencia adscrita a la Secretaría de Gobernación, cuyo titular (y jefe de José María), en ese entonces era Miguel Ángel Osorio Chong.
Al frente del Fonden, Tapia Franco ejerció un presupuesto anual de siete mil millones de pesos.
La organización civil “Mexicanos contra la Corrupción” escribió: “Desde que asumió la Presidencia, López Obrador ordenó liquidar el Fondo Nacional de Desastres (Fonden) por considerar que era un instrumento de corrupción. Sin embargo, el exdirector de ese fondo en el sexenio de Peña Nieto no sólo ha hecho negocios multimillonarios con el actual gobierno federal, sino que ahora busca convertirse en el candidato a la alcaldía de Querétaro por la coalición Morena-Verde-PT”.
Descalificado por el morenismo
Así, tanto el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, como la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo han coincidido en referir que en tiempos de Peña Nieto, el Fonden fue un organismo dominado por la corrupción.
Nuevamente cito a “Mexicanos contra la Corrupción”, pues recordó que el 24 de septiembre de 2013, “el senador Alejandro Encinas expuso en la tribuna legislativa que ‘cuando el director del Fonden, José María Tapia, andaba de parranda en Las Vegas’, los huracanes provocaron destrucción en Guerrero. La inacción de la autoridad fue calificada por Encinas como “un asunto de omisión y de negligencia criminal”.
Y aun así, el 18 de octubre del año pasado, los dirigentes del PVEM en México y en Querétaro, confirmaron que Tapia sería su candidato a la alcaldía de la capital queretana.
Sin respuesta
Y entonces, si ya se tenían estos antecedentes, si ya se sabía que para López Obrador y para Morena en general no era aceptable José María Tapia como su candidato, ¿Por qué el PVEM insistió que fuera el abanderado de la alianza? ¿Por qué, incluso, Tapia se proclamó ganador de las encuestas antes de la designación oficial de la candidatura?
Más aún, ¿Qué motivaciones reales hay detrás de la ruptura misma de la alianza con Morena y el PT? ¿Qué o quiénes son los que respaldan la postulación, que son más poderosos que la ruptura misma e incluso sabiendo que son mínimas sus posibilidades de ganar?
Hay quienes piensan que esta determinación obedece, más que a la idea de ganar la elección, a la intención de ayudar a otro a triunfar.
Juan José Arreola de Dios
Periodista / Comunicación Política
Twitter: @juanjosearreola