Autoría de 9:55 am #Destacada, La Entrevista

Busca Silvia Amaya sumar a la matrícula de la UAQ a estudiantes mexicanos en EU

ENTREVISTA: PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ/LALUPA.MX

FOTOS: RICARDO ARELLANO/LALUPA.MX

La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) tiene como meta aumentar la matrícula de estudiantes y sumar a alumnos mexicanos en Estados Unidos, mediante la inversión en las tecnologías de la información, como uno de los proyectos claves de la rectora de esta casa de estudios, Silvia Lorena Amaya Llano.

En entrevista con lalupa.mx, la rectora de la UAQ sostiene que hay jóvenes mexicanos que viven en Estados Unidos con el interés por estudiar el bachillerato virtual en la alma mater queretana, como una manera de continuar con su preparación mientras viven allá.

“Ha habido acercamientos para firmar convenios de colaboración con migrantes en Estados Unidos para ofrecer este servicio. Finalmente, la universidad tiene que responder a las necesidades que vemos que demanda la ciudadanía”, afirma Amaya Llano, al explicar que hoy el reto es conseguir las metas en materia de tecnologías de la información.

Frente a los compromisos con la sociedad queretana y la comunidad universitaria, la tercera mujer en dirigir la rectoría de la UAQ se declara a favor de la conciliación y el diálogo, por encima de cualquier confrontación; reconoce el legado de quienes construyeron una universidad fuerte y promueve la unidad entre los campus y academias de la institución.

“Mi compromiso es seguir avanzando en la excelencia académica, ese es el objetivo esencial, además de la responsabilidad y contribución social que como universidad pública tenemos. Nuestro objetivo principal es formar ciudadanos que permitan ser agentes de cambio en nuestra sociedad, son nuestros embajadores y quienes van a llevar nuestra voz y distribuirla, no solamente en nuestro estado sino en otros niveles y queremos que nuestras egresadas y nuestros egresados sean ejemplo”, subraya.

El legado y los retos de la UAQ

El año pasado, Silvia Amaya se convirtió en la tercera rectora en dirigir la UAQ y tiene claro el reto que asumió, como universitaria y como mujer; sin embargo, ya tuvo un desafío similar cuando dirigió la Facultad de Química en la misma institución educativa.

Esta facultad fue la primera en tener un centro de investigación, la primera maestría y el primer doctorado, así que la “vara siempre estuvo alta” y cuando asumió la dirección se hizo la misma pregunta que en rectoría: “¿Cómo podemos ir sumando a lo que quienes nos han antecedido han trabajado?”.

“Mi compromiso ante este honorable reto pues es trabajar en dejar una universidad con mejores indicadores académicos, con mejor posicionamiento, con mejores indicadores en cuanto a internacionalización y reconocimiento de la que recibí el 15 de enero. Sé que siendo mujer siempre se ve con lupa lo que se hace, vengo de dirigir la facultad de Química. La facultad, antes que yo, tuvo una directora electa por la comunidad y hoy una directora interina, reconociendo que ha sido consecuencia del trabajo que se hizo en años anteriores, tuve la oportunidad de dejar a la facultad en el primer lugar de indicadores académicos al interior de la universidad, entonces, somos una facultad que siempre ha sido punta de lanza”, agrega.

Reconoce que el trabajo de las mujeres siempre se revisa con más atención, pero también existe más apertura y más reconocimiento, además que hay decisión a trabajar en equipo para consolidar los proyectos de la UAQ y “tengo muchas ganas de conseguir este objetivo de que la universidad siga creciendo”.

“En estas posiciones si haces las cosas bien es porque para eso te pagan y si no, es porque no tienes la capacidad, al final hay que trabajar porque las cosas vayan bien porque es lo que puedes dejar como aporte para lo que viene”, dice la académica que tiene 30 años de servicio en esta universidad.

El prestigio de la UAQ, reconoce, es producto del trabajo de mucha gente y este trabajo en equipo le abre la puerta a muchas personas más; por eso, garantiza que existirá continuidad en los proyectos y programas de la universidad, frente a los muchos retos que quedan por resolver.

“Lo importante es tratar de llegar a acuerdos, buscar soluciones, más que polemizar algún tema, vamos resolviendo poco a poco. (Por ejemplo) Para mí era muy importante llegar a un buen acuerdo con los sindicatos porque eso nos da certidumbre, no solamente a mí, sino a la comunidad, por eso el diálogo y el tratar de conciliar”, dice frente a la solicitud de aumento del 20 por ciento por parte de los sindicalistas, que, tras un proceso de diálogo, y con sensibilidad, aceptaron un aumento de más del 4 por ciento, por encima del tope que marcó la UNAM.  

El agua es otro pendiente. “Vamos a hablar con la Comisión Estatal de Aguas (CEA) para definir de manera puntual los puntos críticos del convenio, un problema que no se ha podido resolver en un tiempo largo”. Este fin de semana, la UAQ y la CEA firmaron un el “Convenio Marco de Colaboración” con el que se llevará a cabo la regularización histórica del servicio integral en el suministro del agua.

El convenio permitirá que la UAQ realice una contribución a la CEA de 14.7 millones de pesos por servicios integrales de agua potable, alcantarillado y saneamiento de sus predios e inmuebles, de los que la universidad entregará cinco millones de pesos y el resto será con la elaboración de programas, planes, proyectos de investigación y demás estudios que solicite el organismo operador del agua.

Gestionar los transportes que era una necesidad de los trabajadores “y ha habido la apertura de gobierno, también tenemos que reconocer que sin perder la autonomía tenemos que buscar cómo hacer equipo con el gobierno porque es universidad pública y requerimos, respetando y haciendo respetar nuestra autonomía, trabajar en colaboración, el beneficio que para nosotros representa el que nos den esta ruta, beneficia  a la comunidad, nos permite distribuir los transportes en otras rutas que también son necesarias”.

En febrero pasado, la UAQ anunció el convenio con la Agencia de Movilidad de Querétaro, que habilitó dos rutas de los campus Juriquilla y Aeropuerto hasta el Centro Universitario y el apoyo se suma a los diferentes programas y por lo menos 11 tipos de beca que se ofrecen para los 33 mil 576 alumnos, dos mil 894 docentes y dos mil 602 administrativos.

Cambios tecnológicos

Silvia Amaya afirma que el aporte y la contribución de cada universitaria y universitario facilita cambios importantes en la actitud y el servicio, para que la población pueda ver la diferencia, “el antes y el después en nuestra sociedad”. Para cumplir con esta transformación, la UAQ le quiere apostar a las Tecnologías de la Información (TI), porque al menos el 50 por ciento de los aspirantes a preparatorias quedan fuera de la convocatoria a este nivel educativo.

Con esa medida, la UAQ también pretende cumplir las observaciones de los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior (CIEES), que acreditó a la UAQ con señalamientos que se deben resolver para la mejora continua, así que trabajar con las TI se sumará a este cumplimiento.  

“Tenemos que aumentar la capacidad de nuestros servidores y hay que invertir una buena cantidad de recursos para que seamos eficientes en los próximos años. Se requiere una inversión importante de dinero, pero vamos a gestionar porque es prioritario, así iremos atendiendo las necesidades que detectamos cuando hicimos las visitas a los diferentes campus, las reuniones que hemos tenido con directores, con los diferentes coordinadores”.

Para trabajar sin problema en los proyectos de TI de los siguientes tres años, la UAQ requiere siete millones de pesos, pero la meta es gestionar recursos suficientes para la próxima década, porque “las necesidades van cambiando y los recursos pues hay que gestionarlos”.

Apostarle a las TI permitirá “abrir más espacios y aumentar la matrícula”, porque hoy la universidad tiene limitaciones en infraestructura, “pero vemos un área de oportunidad en apostarle a esta parte de Tecnologías de la Información, a una bien llevada modalidad virtual, con toda la capacitación”.

Aunque esta modalidad no aplicaría para todas las carreras ni todos los programas en la UAQ, porque no todos cuentan con las herramientas y los apoyos didácticos, sí sería posible utilizar este esquema en algunas carreras para llegar a zonas donde hoy se tienen limitaciones físicas. Además, el objetivo principal es cubrir la demanda en el bachillerato.

“Quienes están interesados en llevar el bachillerato de manera virtual son mexicanos que viven en Estados Unidos y allá no tienen la posibilidad de estudiar y ven en esta modalidad una posible solución a seguir preparándose. Ha habido acercamientos para firmar convenios de colaboración con migrantes en Estados Unidos para ofrecer este servicio, finalmente la universidad tiene que responder a las necesidades que vemos que demanda la ciudadanía”.

La UAQ no tiene todavía una fecha ni una meta estimada de alumnos que podría atender con esta modalidad porque dependerá de los convenios y gestiones que se realicen. Por ahora, el compromiso es aprovechar al máximo posible el presupuesto de tres mil 438 millones 439 mil 435 pesos de este año, un aumento del 7.13 por ciento con respecto al año pasado. De esa cifra, mil 286 millones 516 mil 290 pesos provienen del gobierno estatal y mil 726 millones 297 mil 626 pesos de subsidio federal.

En este momento, la UAQ tiene cinco planteles en la zona metropolitana, uno con modalidad mixta y cuatro con modalidad escolarizada, además del nuevo proyecto en el campus Aeropuerto, seis en los municipios de la región Centro Sur y cinco en la región del Semidesierto-Sierra Gorda. También tiene seis campus en la zona metropolitana, seis en la región Centro Sur y dos más en construcción, cinco campus en el Semidesierto-Sierra Gorda, de los que uno está en construcción y otro en comodato. Con esta infraestructura, la UAQ tiene presencia en 17 de los 18 municipios del estado.

La rectora insiste que, al asumir este cargo, se comprometió también a llevar a cabo todas las modificaciones y acciones de continuidad que se requieren en la UAQ, porque su compromiso es “seguir avanzando en la excelencia académica, ese es el objetivo esencial, además de la responsabilidad y contribución social que como universidad pública tenemos”.

“Nuestro objetivo principal es formar ciudadanos que permitan ser agentes de cambio en nuestra sociedad, son nuestros embajadores y quienes van a llevar nuestra voz y distribuirla, no solamente en nuestro estado sino en otros niveles y queremos que nuestras egresadas y nuestros egresados sean ejemplo y con el aporte y la contribución de cada uno podemos hacer cambios importantes, eso es lo que debemos llevarnos como tarea los universitarios, que se note que tenemos un cambio en cuanto a la actitud, el transformar, el servir, el apoyarte como ciudadanos, eso nos permitirá ver la diferencia, un antes y un después en nuestra sociedad, que es lo que requiere”, puntualiza.

(Visited 264 times, 1 visits today)
Last modified: 21 mayo, 2024
Cerrar