Autoría de 6:38 pm #Destacada, En el Confesionario

A veces me volaba las clases para ver Dragon Ball: Carlos Bautista

ENTREVISTA: ANA MARÍA RESÉNDIZ/LALUPA.MX

FOTOS: RICARDO ARELLANO/LALUPA.MX

Amante de las películas, no de las series, pues éstas lo estresan, Carlos Bautista Sánchez, presidente del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro, señala que una de sus cintas favoritas es Guerra Mundial Z. Dice que tuvo que cambiar de equipo de futbol al migrar de Pachuca a Querétaro y, aunque le es difícil encontrar tiempo libre, cuando lo tiene, lo dedica a su familia y a sus amistades más cercanas. 

Fan del pozole, las enchiladas con cecina y las estrujadas, comenta, a “En el Confesionario” de lalupa.mx, que el tequila es signo de fiesta larga, por lo que en una reunión social opta por el whisky. Destaca que gracias a su lectura en temas técnicos contables, pudo llegar a donde está. Subraya que al ser de “la vieja escuela” si pudiera, seguiría usando Messenger de Hotmail. Y revela que cuando era estudiante llegó a “volarse las clases” para ver las caricaturas de Dragon Ball.

¿Cómo comienza tu día?

Mi día inicia a las 5:00 de la mañana, cuando suena la alarma. Nos levantamos, mi esposa a preparar a los niños   —tenemos tres niños— y yo a prepararme porque acostumbro nadar; preparo mis cosas, me voy hacia la acuática, pues entro a nadar a las 6:00 de la mañana, termino la rutina y a las diez para las 7:00 ya estoy fuera. Regreso a casa a desayunar, a cambiarme y estar listo para ir, ya sea a actividades propias del colegio o a actividades de mi despacho.

¿Te hubiera gustado dedicarte a algo más que no fuera a la contaduría?

Algo muy curioso sucedió conmigo, porque empecé a estudiar la carrera de Contador Público sin saber realmente qué era. Tuve una influencia importante de la familia de un buen amigo de la secundaria: su papá era contador y platicaba lo que hacían; viajaba mucho por las labores de su papá. Me entró esa espinita de querer ser contador y, cuando egresé de la secundaria, ingresé a un CBTis (un Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios). Ahí estudié la carrera técnica, pero desde el primer semestre empecé, a los 14 años, con economía, administración, materias ya de formación. Era una locura para mí, hasta me confundía de materias, pero le agarré el gusto. Terminé la carrera técnica, inicié de inmediato con la universidad y, cuando iba en tercer semestre entré a trabajar a un despacho de contadores. Cuando estaba en séptimo semestre de la carrera, ya estaba al frente de ese despacho, y empecé a adquirir mucha experiencia. Jamás, jamás, se me ocurrió dedicarme a otra cosa.

Posteriormente, estudié Derecho, pero con la única finalidad de complementar las actividades que ya realizaba, es decir, no tenía en mente dedicarme a ser un abogado postulante. Lo hago actualmente, sobre todo, en cuestiones administrativas contra autoridades, Hacienda y demás, pero no era mi intención. Hay muchas cosas que nos suceden en el ámbito contable fiscal y de la asesoría en un área se desprenden otras necesidades. Anteriormente, antes de que estudiara Derecho, este tipo de asuntos los mandaba con algún abogado amigo o despacho y decía: vamos a hacer una alianza.

Actualmente, podría asegurar que un 70 por ciento del total de mi tiempo lo dedico a las labores del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro y en el 30 por ciento restante le doy mi atención y seguimiento a los asuntos de mi despacho. Tengo un gran equipo de trabajo, que me permite dedicarle ese tiempo al colegio.

¿A qué actividad nunca te dedicarías?

Sé lo que me gusta y me apasiona: todo lo relacionado con la parte de contabilidad. No he pensado en qué no me gustaría. En algún momento me preguntaron si me gustaría dedicarme a la política, pero para la política se necesitan ciertos talentos que no creo tener, por lo tanto no estaría interesado. Podría haber más cosas a las que no me dedicaría, pero no las tengo claras, las que sí tengo claras son las que me gustan. 

¿En qué red social te sientes más cómodo?

Soy de la vieja escuela. Si me dieran a escoger, en Messenger de Hotmail sería feliz, porque es con el que crecí, pero ahorita, de todas las redes sociales, con la que más me identifico, porque para mí es más fácil de usar, es Facebook. De ahí en fuera, de repente, veo algunos TikToks, pero no participo. Y hasta ahí, a todas las demás las conozco, ingreso, tengo cuentas, pero no interactúo.

¿A qué dedicas tu tiempo libre?

Hablar de tiempo libre es complicado. Entre semana, la carga de trabajo y de actividades es muy pesada; voy regresando a casa ya muy tarde, si bien me va, a las 8:00 de la noche, y si no, a las 10:00 u 11:00 de la noche. Los fines de semana, procuro no tener ninguna actividad de trabajo, sólo si es necesario o si hay algún evento, hay que estar pendientes.

Disfruto mucho salir con mi familia, irnos a comer a un buen lugar, salir con mis hijos, son pequeñitos pero les gusta mucho el básquetbol, irnos a las canchas. Tengo la fortuna de tener un círculo de amigos muy cercanos que nos visitan mucho; convivimos, platicamos, nos ponemos al día. Hablar de tiempo libre, cuando lo tengo, es convivir con la familia y con las amistades cercanas. 

Con Alejandra Montes, su esposa

¿Serie o película?

Película, 100 por ciento película. Me estresan las series, no tengo tiempo suficiente para poderlas terminar cuando ya me quedé picado.

¿Cuál es tu favorita?

Me han gustado varias, sobre todo ahorita que la oferta de películas está tremenda, aunque quiera no las puedo ver. Un género que no me gusta, aquí sí sé lo que no me gusta, es el de terror y a mi esposa le encanta. A veces me obligua a ir al cine con ella y voy porque hay que acompañarnos, pero las que más me gustan son las de acción, la película de Guerra Mundial Z es de mis favoritas, la he visto ya varias veces. También me gusta la comedia, me libera el estrés. Televisión abierta no veo.

¿Por qué no te gusta el terror? 

Me estresa, pero hago la mención porque a mi esposa le encanta, es el género que más le gusta.

¿Cómo está integrada tu playlist?

Es muy variable, dependiendo de la ocasión. Soy de fiesta, que pongan la música que quieran. Cuando estoy en mi oficina, y si tengo oportunidad, pongo algún bolero, canciones de guitarra. Cuando voy en el auto, un mal hábito es que casi no escucho música, porque me la paso hablando por teléfono; siempre que voy a salir hago una llamada, llego a donde voy y me fui hablando. Obviamente con el bluetooth para no llevar el teléfono en la mano. Cuando tenemos que salir, siempre, siempre, en los trayectos, es ir atendiendo algún otro asunto, o voy con alguna persona y vamos hablando de algún tema, casi siempre de trabajo. 

Tu género favorito.

Estando solo, disfruto mucho escuchar a Vicente Fernández y no porque esté en una fiesta. Ayer me sorprendí escuchando a Luis Aguilar. A lo mejor no estoy tan grande, pero toda esa vieja época me gusta mucho.

¿Tu equipo de futbol?

Gallos Blancos. De hecho, estudié mi carrera en Pachuca, Hidalgo, soy de allá, y cuando estaba allá, iba mucho al estadio, mi equipo eran los Tuzos del Pachuca. Cuando emigré a Querétaro, en 2001, tuve que tomar una decisión, porque al principio quería seguir yendo al estadio de Pachuca, pero dije: debo ubicarme, ya no estoy en Pachuca, por lo tanto, le empecé a tomar gusto al Querétaro. Y cada vez que tengo oportunidad asisto al estadio.

¿Tu libro de cabecera y por qué?

Tengo muchos libros, no los que yo quisiera, pero muchos son de cuestiones técnicas relacionadas a mi profesión. Tengo la idea de que gracias a mi gusto por la lectura en temas técnicos fue que pude tener una experiencia importante dentro de mi profesión.

Mencionaba que desde tercer semestre empecé a trabajar en un despacho. El contador titular en ese entonces tenía un proveedor de libros que iba periódicamente a ofrecer las obras que tuviera en ese momento y, quien elegía las obras para el despacho, era yo, porque a mí me gustaban. Teníamos las revistas semanales o quincenales y el primero que las leía era yo. Los ratos libres que tenía eran para leer, principalmente, las revistas de notas fiscales. Actualmente, cuando tengo oportunidad de comprar un libro lo hago, no importa que esa materia la haya estudiado anteriormente, pues el punto de vista de otro autor siempre es muy bueno para mí.

Últimamente leo mucho temas de prevención del lavado de dinero. El libro más reciente que compré es del REPSE (Registro de Prestadoras de Servicios Especializados y Efectos Fiscales, Contables y Laborales). El REPSE ya no es novedad, pero estuve en la presentación de ese libro, me gustó y lo compré, y es el que tengo ahorita en mi cabecera, siempre tengo un libro en el buró.

¿Cuál es tu platillo favorito, ese que comerías toda tu vida y nunca te cansaría?  

En mi top 3 está el pozole, me encanta, soy pozolero y, en Querétaro, he recorrido muchos lugares. Las otras son las enchiladas con cecina, ya hasta se me antojó. Esos platillos los cocinaba mi mamá y por eso es que me gustaban mucho. Y hay una comida, que no es muy común. Son las estrujadas. Es una tortilla hecha a mano en una salsa en molcajete, salsa picosa con chile verde y jitomate; la tortilla la ponen sobre el molcajete y le echan un poquito de manteca de cerdo, es el ingrediente especial, y con la misma piedra del molcajete trituran la tortilla, le da un sabor muy especial. No me cansaría de comer esas tres cosas.

¿Tequila o vino?

Me encanta el tequila, pero cuando empiezo a tomar tequila es porque la fiesta va a ser larga y procuro no hacerlo. Ya no tengo en mente cuándo fue la última vez que tomé tequila. Normalmente tomo whisky y lo que más tomo es vino, me gusta mucho el tinto con una buena comida, un buen corte para el maridaje, para el sabor, nada más. Y cuando hay alguna reunión social, whisky; no más de tres copas. 

¿Tu personaje histórico favorito y por qué?

Dentro de la formación, en la parte de contabilidad, nos van generando un pensamiento muy cerrado, muy concreto y muy enfocado a la profesión. Cuando estudias Derecho, híjole, te abren el panorama de manera importante. Son carreras que tienden a ser muy contrarias por el tipo de pensamiento que te van formando. Hablar de personajes históricos, desde el punto de vista de un licenciado en Derecho, tendría muchos y cada uno pudiera tener una aportación diferente a mi formación y a mi persona. Sería difícil de definir uno.

¿Pero hay algún personaje histórico con el que le gustaría platicar si tuvieras la oportunidad?

Hay un personaje que, en mi opinión, la historia no le hace honor a lo que realmente fue; y tiene sus claroscuros, por supuesto. Es Porfirio Díaz. Fue un dictador, sí, pero si revisamos sus logros económicos, el avance que tuvo en el país durante toda su gestión, nos damos cuenta que hay cosas que se pueden rescatar. Sería muy interesante conocer sus puntos de vista o saber cómo pensaba. La parte mala es que se perpetuó en el poder porque no le dio oportunidad a otras personas.

Otro más reciente es Carlos Salinas de Gortari. Para mí es una persona muy inteligente. Robó, hizo fraudes, nos metió en broncas, sí, y eso hay que reprochárselo, hay que recriminarlo, pero en la mente pensante, creo que es una persona de las más inteligentes que han existido, independientemente de los fines en los que haya utilizado esa inteligencia.

¿Un personaje de ficción?  

Cuando estuve en la carrera, fui un estudiante que, como ya ejercía, de repente, llegaba a una clase y decía: esta me la voy a volar; porque según yo ya sabía lo que iban a decir y no es cierto. Ahora entiendo que todos los maestros tienen algo que enseñarnos. Pero a veces me volaba las clases y la razón principal por la que me volaba las clases era para ir a ver una caricatura que se llama Dragon Ball. 

En algún momento, en una plática mencioné eso y, un día, un cliente me trajo una figurita y, luego, otro cliente vio que la tenía y me trajo otra. Ya tengo una colección. Un cliente que fue a Japón me dijo que hay una calle dedicada al anime, y me trajo un personaje comprado ahí. Supuestamente viene de Japón, aunque ahí dice hecho en China. ¡Y tengo más! Sólo que esos me los he llevado a casa o viene mi hijo de nueve años, los ve y los agarra.

¿Y de entre los personajes de Dragon Ball, cuál es tu favorito?

Goku.

¿Qué es lo que más te entristece en la vida?

Ver gente cercana que no está bien en cualquier aspecto. Muchas veces eso me incentiva a ver cómo ayudar y he tenido muy buenas experiencias. Por ejemplo, mi actual gerente general, hice cosas para ayudarla y ella terminó ayudándome a mí. Es una persona de mucha confianza a la que le puedo dejar la oficina y salirme a hacer las labores propias del colegio. También he tenido sorpresas desagradables, hay de todo. Presumo lo bueno porque creo que cuando puedes ayudar y lo haces, te va mejor a ti, y qué bendición de estar en el lugar del que ayuda y no del que está pidiendo el apoyo.

¿Cuál es tu ideal de felicidad?

Estar rodeado de la gente que quiero y que todos estemos realizados en lo que queramos. Uno, es hacer lo que tengas que hacer para comer, en el buen sentido, es decir, dedicarte a la profesión que te genere un sueldo, un rendimiento, una utilidad, un dividendo, dependiendo de la faceta en la que te encuentres. Dos, hacer la actividad en la que eres bueno, eso va a generarte una realización como persona. Tres, hacer lo que te guste hacer, aunque no seas bueno; a mí me gusta nadar, pero nadar mil 800 metros es muy poquito, tengo compañeros que nadan 3 mil y de ahí para arriba, yo estoy muy abajo, pero me gusta. Cuando estas tres cosas las puedes realizar en la misma actividad, eres bendecido. A mí me gusta lo que hago, amo mi profesión y me pagan por hacerlo, y soy bueno. Si todos pudiéramos hacer eso, estaríamos felices. 

¿Cuál es el principal rasgo de tu carácter?

Soy muy estricto. Soy de las personas que, si la reunión es a las 9:00, debo estar por lo menos cinco minutos antes. Se me hace una gran falta de respeto cuando cito a una hora y no empiezo en punto, eso me estresa, me conflictúa mucho, porque siento que es uno de los valores que más hemos perdido. 

Mi papá fue militar durante nueve años, era súper estricto y de ahí aprendí; y creo que aprendí bien. Si algo me puede definir es eso, y me ha ayudado, no solamente en las cuestiones de puntualidad, también en el hacer. A lo mejor también por mi formación de contador, que es muy de estar encima de los procesos, y me ha resultado.

¿Qué es lo que más detestas de los hábitos propios?

Choco, a veces, con mi forma de ser porque, aunque sé qué y cuándo se tiene que hacer, no me gusta ser autoritario, no soy lo suficientemente estricto para presionar.

¿Y de los ajenos? 

La falta de respeto a los tiempos de los demás.

¿Qué don te gustaría poseer?

Saber lo que piensa la gente me encantaría. He tomado cursos de cómo saber si una persona está mintiendo, que si parpadea, que si voltea para otro lado, cosas que, de repente digo, es pura vacilada. Y muchas veces no sé leer a una persona, hay personas que no las entiendo y digo: con esto que platiquemos va a decir que sí; y me dice no y yo: ¡ah caray! ¿Dónde estuvo el tema? Y no porque yo quiera siempre que la gente haga lo que yo quiero, cuando interactúo con la gente, pienso: ¿esta persona qué va a ganar de esta charla? ¿O qué va a ganar de este negocio? ¿O qué va a ganar de este trabajo? Siempre busco que las dos partes ganemos.

¿Cómo te gustaría morir?

Lo he pensado sobre todo recientemente. Me enteré de la noticia de que falleció un buen amigo. Cuando platiqué con su hijo, dijo que fue al doctor, iba cada mes. El doctor tiene una sala y, después de la consulta, él siempre le decía: oye, me voy a quedar un ratito. Entonces, él subía, había sillones ahí, y se quedaba dormido; y después de media o una hora, despertaba y seguía sus actividades. Y en esa ocasión, hace menos de un mes, fue al doctor un sábado, pidió permiso, se fue a dormir y ya no despertó. A mí me encantaría morir así, sin sentir nada.  Es como el chiste del conductor del autobús, el que dice: yo quisiera tener una muerte como la del conductor, ¿cómo? Simplemente se quedó dormido y ya, no como sus pasajeros que iban gritando.

Defínete en tres palabras.

Trabajo, disciplina y respeto. 

¿Cómo te ves en un futuro?

Quiero seguir trabajando por gusto, no por necesidad. Gracias a Dios estamos muy bien, pero sí quisiera tener una cuestión económica solvente —no pretendo en ningún momento dejar de trabajar— y una cuestión familiar realizada, que mis hijos puedan estar haciendo lo que les gusta, que les paguen por eso y que sean buenos. Para mi sería lo ideal. Seguir conviviendo con mi familia y con mis amigos. 

¿Cómo ves a Querétaro hoy y cómo te gustaría verlo? 

Querétaro está muy bien. Querétaro me ha dado de comer, es muy avanzado en muchos aspectos. Me gusta mucho vivir en Querétaro: vas al cine, vas a un buen restaurante, diversión, todo. Pero creo que viene una situación un tanto complicada, no nada más en Querétaro, sino a nivel nacional por haber sucedido dos cosas en política: uno, que a nivel nacional haya repetido el partido en el poder, por la tendencia de sus decisiones; y dos, que en Querétaro también haya ganado este partido. Ahora la mayoría en el Congreso será de oposición y, de entrada, van a empezar a ponerle piedritas al gobierno.

No es que el gobierno haga todo bien, veo en Querétaro una gran cantidad de aciertos y también equivocaciones, pero son las menos. Y a nivel nacional veo cosas buenas, pero son las menos. Si ese tipo de política va a permanecer en Querétaro, a lo mejor no vamos a estar tan bien como lo hemos estado hasta ahora. 

Ojalá que quienes están llegando al poder tomen buenas decisiones y, sobre todo, pensando en el trabajador. Yo estoy a favor del trabajador y de la empresa, pero sé que si un empleado se queda sin trabajo, en Querétaro, lo va a encontrar y lo va a encontrar pronto; si un empresario se queda sin empresa, no nada más pierde el empresario, pierden todos los que de manera directa o indirecta están viviendo de esa empresa, incluida toda la cadena de suministro, pero sobre todo los empleados.

Si el gobierno actual no cambia su forma de hacer política, si no le habla a la gente que está votando mayoritariamente por la oposición, las elecciones, dentro de tres años, para gobernador, estarán en riesgo y, si esto sucede, las nuevas políticas podrían no continuar generando un desarrollo tan pujante como ahorita. Que sepan leer lo que sucedió en las elecciones anteriores y vean cómo van a solucionar eso para que en tres años no nos den un susto. Llegan empresas y nosotros, prestadores de servicios, estamos aquí para ayudarles. ¿Qué pasa si la empresa se va? También se va mi trabajo, que yo soy indirecto. Estamos por arriba de la media nacional en crecimiento económico; deseo que así siga, aunque haya un cambio de partido en el gobierno.

¿Cómo quieres ser recordado en el Colegio de Contadores Públicos de Querétaro?

Como una persona que trabajó en beneficio de su colegio, en todas las áreas, porque tenemos varios frentes abiertos: jóvenes, apoyo a la comunidad, capacitación, orden administrativo, tecnología. Quisiera que digan: este cuate hizo esto, intentó hacer esto, inició esto; porque hemos tenido gestiones con presidentes de papel y no ha habido mucho movimiento en el colegio. Yo ingresé en enero y había instituciones de gobierno donde el colegio no aparecía y no aparecía en su radar porque los anteriores colegas presidentes no habían hecho un acercamiento adecuado y suficiente. Ahorita, ¡claro que ya estamos en el radar del gobierno estatal y municipal! Hemos participado con ellos.

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Last modified: 3 septiembre, 2024
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