HISTORIA: PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ/LALUPA.MX
Comercios, empresas y escuelas cerradas, menor uso del transporte público y calles casi vacías, son algunas de las consecuencias de los contagios del Covid-19 en Alemania e Italia, narraron a lalupa.mx dos queretanas que se encuentran en esos países, donde se pide extremar las precauciones para contener el virus y no colapsar los sistemas de salud.
Amanda y Karla, en Italia y en Alemania, respectivamente, notaron el cambio en los estilos de vida desde hace algunas semanas: la gente prefiere no salir o caminan al trabajo para evitar el transporte público, el acceso a supermercados está bajo control en ciertos casos y algunas personas “tienen mucho miedo” porque no saben cómo podría avanzar el coronavirus.
SUFRE ITALIA EN SILENCIO
Amanda Santos tiene 5 años de vivir en el norte de Italia. Vive en Ferrara, la segunda sección italiana más afectada por el virus, a 400 kilómetros de Roma. Desde hace 3 semanas se suspendieron las clases en Ferrara para evitar contagios, se continuó con las restricciones de horario en los establecimientos, hasta llegar al cierre total y ahora se necesita un permiso de gobierno para salir a la calle.
Al principio solo se les pedía que mantuvieran una distancia de un metro con el resto de la gente y que no se congregaran muchas personas en un solo sitio, “pero las cosas han ido en aumento, esas restricciones no ayudaron a controlar el número de casos con la infección y el lunes hicieron un nuevo decreto donde ahora están cerrando todo, en todo el país, no nada más en la zona norte donde vivo yo, mi región es la segunda más afectada”.
Casada con un italiano, Amanda tiene una hija de 3 años y vio cómo avanzó “drásticamente” el contagio del virus, por lo que las escuelas permanecerán cerradas hasta el 3 de abril y todos los negocios suspendieron labores, con excepción de los supermercados y farmacias, así como otros de primera necesidad, mientras que la gente trabaja desde casa.
Los últimos días Amanda se presentaba en la escuela de idiomas donde enseña inglés y español y daba lecciones a través de algunas aplicaciones, pero ahora se hace imposible.
“Ahora voy a trabajar desde casa, porque si sales a la calle debes traer un permiso, una forma que da el gobierno, para declarar que te estás moviendo por motivos importantes, por necesidad de trabajo o de salud y si no traes ese documento y no respetas las reglas dan multas estratosféricas y te queda un antecedente penal aparte de la multa, están siendo muy severos”, dijo la queretana.
En los supermercados hay filas porque se controla la cantidad de gente que entra y los hospitales “se están saturando, los médicos eligen a quienes le dan respirador o lo que necesitan y ese es un problema grande, las cosas están un poco severas, se siente un silencio exagerado porque la gente está asustada y estamos a la expectativa”.
“Está prohibido salir de tu región, necesitas impresa la auto certificación que emitió el gobierno. Toda la gente está apegándose a la regla y está asustada, los niveles de contaminación han disminuido 40% porque nadie sale. Toda la gente tiene mucho miedo, no sabemos hasta qué punto puede llegar ni los resultados de las medidas que se están tomando. Yo soy optimista, pero sí hay mucho temor por los niños, aunque no ha habido casos en niños y aquí hay mucha gente anciana, que es la más vulnerable”, agregó.
Amanda agregó que la preocupación principal es la saturación en los hospitales y por eso se hace tan importante contener la propagación del virus, además que hay varios médicos que se contagiaron.
ALEMANIA A LA EXPECTATIVA
La comunicadora Karla González vive en Alemania desde hace casi 2 años y hasta hace dos semanas la situación estaba “tranquila”, pero al menos una ciudad de este país ya recurrió a la “cuarentena doméstica”, así que las personas contagiadas deben permanecer en su casa.
“Aquí en Berlín las autoridades dijeron que se van a suspender las actividades en las escuelas, todavía no se ha establecido que la gente ya no salga, como en Italia, donde todos trabajan desde casa, pero por ejemplo, en la empresa de mi marido les recomiendan no viajar entre una ciudad y otra y no salir del país, porque el contagio ha sido por contacto entre la gente”, relató Karla.
De manera constante el ministerio de Salud de Alemania informa qué ciudades presentan mayor riesgo para que la gente tome sus precauciones y se recomienda no asistir a lugares muy concurridos, tomar muchas medidas de higiene y no salir si no es indispensable.
Karla vive a 6 kilómetros de la estación central de trenes de Berlín y se da cuenta que mucha gente prefiere caminar a su trabajo en lugar de utilizar el transporte público, además que hacen sus compras por internet para evitar conglomeraciones. A eso se suma la insistencia de las autoridades para que la gente se mantenga informada con el fin de evitar que se saturen los servicios de salud.
“Aquí había miedo de la influenza porque ha matado más gente, el coronavirus, como todavía no hay suficiente información, pues lo único que se hace aquí es pedir que se evite salir, que se eviten los lugares concurridos, extremar las medidas de higiene. Hace dos semanas, cuando recién se informó que había los primeros casos en Alemania, hubo compras de pánico de gel antibacterial y los cubrebocas y las farmacias se vaciaron, pero las autoridades aclararon que los cubrebocas tienen una vida efectiva de 20 minutos”, abundó.
En este momento, la información oficial es más constante, así que muchos conocen la expectativa del gobierno respecto a que para mediados de abril entre el 60 y el 70% de la población alemana podría contagiarse del virus. Aunque en mayo suben las temperaturas y eso podría disminuir los contagios, no se sabe si para el otoño podría presentarse otra vez.
Este temor trasciende países, agregó Karla, porque Italia ya cerró las fronteras, igual que Austria, donde ya nadie sale ni entra y muchos creen que habrá un pico de contagios la próxima semana porque la temperatura no ayuda: este jueves Berlín estuvo a 11 grados con una sensación térmica de 6 grados centígrados, aunque hubo ratitos de sol, pero otros días la máxima fue de 9 grados y la mínima de -1ºC.
“Las autoridades creen que el Covid-19 es un virus que se va a quedar igual que la influenza, que va a llegar con el virus y por eso ahora solo se pide evitar salir más que lo necesario y evitar lugares concurridos”, añadió.
Aunque en los últimos días Karla y Amanda permanecen en sus casas, se animan una a otra mediante los mensajes de voz por WhatsApp y mantienen el contacto con otros mediante las redes sociales, para mantener el optimismo mientras pasa el momento de crisis.