HISTORIA: PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ/LALUPA.MX
FOTOS: GUILLERMO GONZÁLEZ
Un proyecto de investigación sobre alimentos se convirtió en una posible solución para los problemas de anemia y control de obesidad, a partir de polvos para malteadas, atoles, café y otros productos que se realizan con granos mexicanos de bajo costo.
Originaria de Celaya, Guanajuato, Danae Juárez López modificó una serie de productos alimenticios, que regulan el peso y la glucosa, además que dan soluciones específicas como permitir personas con gastritis o colitis consuman café o que la gente intolerante al gluten pueda comer hotcakes.
Egresada de la ingeniería bioquímica, con especialidad en alimentos, del Tecnológico de Celaya, vive en Querétaro desde hace tiempo y hace tres años cristalizó una investigación que le tomó seis años sobre anemia y obesidad.
Durante ese tiempo, trabajó con 800 personas, entre niñas, niños, personas adultas y embarazadas, a quienes se les regalaban los polvos para malteada y galletas. Con el paso del tiempo, se notó una mejora en el rendimiento académico de las niñas y los niños que consumían los productos, además que no se dormían en clase y estaban más atentos.
En cuanto a la desnutrición, se tuvo que el 98% de las personas alcanzaron su peso ideal, lo que significó una recuperación muy significativa. Esos resultados fueron la base para los productos Juchía, que ya tienen presencia en todo el bajío a través de diversos distribuidores, así como tiendas que compran sus productos porque tienen gran aceptación entre los consumidores.
“Lo que hicimos fue tomar productos que ya existen en el mercado, como polvos para malteadas, café, pero ideamos una fórmula diferente, darle un valor agregado altamente nutritivo a los alimentos de consumo masivo que ya existen, pero que a diferencia de los que están en el mercado, estos pueden ayudar a combatir la desnutrición y la obesidad en la población mexicana”, detalló.
Los productos se elaboran con una mezcla de granos, cereales y semillas endémicas del país, a partir de un balance químico que arroja una fórmula optimizada compuesta por avena, amaranto, dos tipos de frijol cocido molido y estevias, que brindan algo sano sin perder el sabor.
GRANOS LOCALES
“La gente en lugar de consumir una malteada llena de azúcar pueden consumir una bebida especial sin azúcar y con sabores totalmente naturales. En la empresa desarrollamos polvo para malteadas con sabores naturales, café para las personas a las que les gusta el café pero se los prohibieron por gastritis o colitis, atoles, harina para hotcakes para personas celiacas (intolerantes al gluten) y no tienen conservadores ni químicos, los ingredientes son naturales y son endémicas del país”, explicó.
Como se pretende conseguir un beneficio social, se descartó importar productos y mejor se recurrió a semillas y granos locales, así como a dar empleo a los queretanos a través de dos instalaciones, una en Celaya y otra en Querétaro, con el fin de mejorar las condiciones laborales.
“La mayoría de nuestros clientes son veganos, vegetarianos, intolerantes al gluten, son adultos mayores, diabéticos, les ofrecemos a todos ellos líneas sin azúcar, sin conservadores, sin químicos. El café es uno de los productos estrella porque está diseñado para las personas que tienen gastritis, colitis o hipertensión, con proteína, fibra y antioxidante, pero esto no tiene por qué costar mucho”, insistió.
Juchiá pretende posicionarse como empresa líder en el mercado de alimentos nutritivos de México, por lo que impulsa la comercialización de sus productos en distintas zonas y aprovecha las redes sociales. El reto es que México alcance un equilibrio en la alimentación, a un bajo costo y con una apuesta a la seguridad alimentaria completamente sana.
