REDACCIÓN/LALUPA.MX
Ciudad de México, 3 de mayo de 2022.- La defensora de derechos humanos Keila Simpson hablaría este domingo en el Foro Mundial Social, realizado en la Ciudad de México, pero no llegó porque fue retenida por Migración en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez. Debido a que no tenía internet en el celular, no pudo comprobar su vuelo de regreso y hospedaje, y la deportaron.
De acuerdo con la abogada Jessica Marjane, Simpson fue incomunicada por más de 10 horas, pese a que en el lugar estaba la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para asistirla. Aunque los organizadores del evento acudieron al aeropuerto con documentos para que permitieran su ingreso a México, personal de Migración no recibió los papeles.
Marjane relata que Simpson formaba parte de una delegación de 20 personas provenientes de Brasil que participa en el Foro Mundial Social, realizado del 1 y al 6 de mayo. De todas ellas Keila, una mujer trans afrodescendiente, fue la única a quien las autoridades migratorias impidieron el acceso, aunque varias de ellas tampoco contaban con documentos impresos ni acceso a internet.
“La persona que la CNDH encomendó de su personal jurídico para acudir al lugar me informa que hasta ese momento Keila recibió por primera vez información con una persona que le tradujo al portugués. Le informó que no cumplió con el perfil de turista debido a que no pudo descargar de internet su boleto de regreso y el hotel, y por la situación de que no tenía un cambio de nombre en su pasaporte, pero hay que recordar que en Brasil es muy difícil el acceso a este derecho”, señaló Marjane.
Ya en Brasil, Keila relató que fue entrevistada por personal de Migración que no sabía portugués y ella no habla español. Para Jessica Marjane es preocupante que “se viven temas de perfilamiento racial” entre personas migrantes y turistas que visitan México, y reclama que no exista un parámetro público sobre cómo se define quiénes cuentan con “perfil de turista”.
Anunció además que organizaciones civiles de Brasil y México buscarán que los protocolos de atención a personas trans migrantes, turistas y solicitantes de asilo incluyan un trato digno, y que las autoridades implicadas se disculpen con Keila, quien en Brasil es reconocida por su labor en defensa de los derechos humanos.
“Lo que es importante es que el actuar del Instituto Nacional de Migración no pase desapercibido, porque sabemos que es una lucha no sólo de las personas trans, sino que es importante que el Estado actúe con análisis diferenciado y comparado en las situaciones de personas históricamente vulneradas. Es un asunto de política pública, de derechos humanos”, comentó la abogada.
Con información de Animal Político