Periodistas latinoamericanos destacan importancia de la crónica frente al poder

Texto: Nitzia Pichardo e Iris Esmeralda Díaz/Centro Universitario de Periodismo de Investigación (CUPI)

Emiliano Ruiz Parra, periodista autor de Golondrinas —libro que retrata las zonas de marginalidad de Ecatepec— y quien participó en el Hay Festival Querétaro 2022, destacó la importancia de la crónica como herramienta de utilidad frente a la “propaganda” del poder y para relatar los temas que ameritan complejidad.

Sin embargo, señaló que “los cronistas no hemos estado a la altura de esa necesidad de la crónica”.

El autor del libro que recupera las historias y la realidad de habitantes en barrios y zonas marginadas de Ecatepec, expresó que se deben hacer crónicas sobre la violencia en el país, pero también sobre aspectos de interés común: “hay que redactar una buena crónica sobre los memes de los gatos, elaborar una crónica sobre lo que es viajar, la comida”.

En relación con el presidente López Obrador y la llamada “Cuarta Transformación”, Ruiz Parra señaló que el gobierno usa la historia con fines propagandísticos para destacar “héroes” y “villanos”. Con este panorama, la crónica debe combatir esta propaganda a pesar de las críticas que hace la Presidencia como contra la periodista Carmen Aristegui, quien fue respaldada por López Obrador en sexenios anteriores, pero en el actual es constantemente juzgada.

Emiliano Ruiz Parra reconoció las fallas de la “4T” con la población, porque no ha resuelto de fondo los derechos sociales.

“El Presidente (López Obrador) no ha querido hacer eso, no ha querido tocarle un peso a los más ricos; lo que hace es desmantelar al Estado, quitarles a las universidades, quitarle a la cultura para repartir migajita a los pobres, pero eso no mejora sistemas de salud, sistemas educativos”.

Entre las historias por contar desde la crónica, Emiliano Ruiz dijo confiar que se “derrumbe” la relación explotadora con las personas de los barrios del Estado de México con el fin de levantar el ánimo de la población.

Emiliano Ruiz Parra manifestó que aunque la o el periodista tenga alguna preferencia a un partido político o funcionario público, “eso no te impide hacer un periodismo serio y profesional”.

Sobre el autocuidado entre el gremio de periodistas, Ruiz Parra —quien moderó la conversación con Jacobo García (El País) y Emma Graham Harrison (The Guardian) en el “Hay Festival Querétaro 2022”— puntualizó la necesidad de pensar en él “Aprender a cuidar nuestra alma, nuestro corazón, a cuidarnos físicamente del riesgo”.

Sobre las problemáticas sociales de Querétaro y la cobertura informativa, el entrevistado destacó que las historias que se deben de contar son sobre la defensa del territorio como un espacio de recursos e identidad, esto en relación con las controversias suscitadas tras la aprobación de la Ley que Regula la Prestación de Servicios, Alcantarillado y Saneamiento de Agua Potable del Estado de Querétaro.

Conflicto armado en Colombia: “no hay víctimas ni victimarios absolutos”

Juan Miguel Álvarez, periodista que recibió el III Premio Anagrama de Crónica “Sergio González Rodríguez” por el libro La guerra que perdimos (conflicto armado en Colombia), destacó que la crónica permite traducir “el mundo rural a los citadinos privilegiados” y recuperar aspectos de las culturas.

En una conversación con el también periodista y editor Felipe Restrepo Pombo al inicio del “Hay Festival Querétaro 2022”, Juan Miguel detalló qué trata de recuperar en sus historias y crónicas.

“Ser cronista es ser traductor de culturas, descifrar el mundo rural profundo a los citadinos privilegiados (…) Mis crónicas, casi todas, pueden ser lecturas de descripciones geográficas. Trato de narrar cómo llego al sitio, cómo es el clima, se ve la topografía, qué colores voy viendo en la vegetación”.

Respecto de tener el impulso como reportero de quererse volver un auxiliar de las víctimas, Álvarez admitió haber cruzado esa línea.

“Sí ha habido momentos donde he tenido que hacer actividades fuera del periodismo (…), para no sentir que estoy haciendo periodismo extractivista, que es que va, extrae y se lleva”. Porque de lo contrario el periodista se sentiría mal de tener la posibilidad de ayudar a una persona y no hacerlo.

Sobre el mantener distancia entre el cronista y el entrevistado en un contexto como los que se viven en Colombia, Álvarez consideró: “En el conflicto armado colombiano, no hay víctimas ni victimarios absolutos… Entender que una misma persona puede ser ambos desarma a cualquiera”.

Por su parte, Felipe Restrepo Pombo, quien ha sido editor de Gatopardo, manifestó: “Se vale que el periodismo muestre que incluso la persona más salvaje, que ha hecho las masacres más tremendas, puede tener los rasgos muy malos, y se vale que lo retraten. Creo que le da toda la dimensión de profundidad”.

José Antonio Gurrea C.