Como cada quincena, sigo recibiendo tus dudas e inquietudes para apoyarte como psicoterapeuta y sexóloga. Mándame tus preguntas a intza69@yahoo.com
PREGUNTA:
Hola, doctora. Buenas tardes. Le platico el contexto: mi esposo y yo somos muy intensos, sexualmente hablando. Hemos experimentado tríos, orgías y reuniones swinger.
De entre todos los tríos que hemos tenido, lo mismo con hombres que con mujeres, a mi marido le jaló un hombre en particular; por ello, un día me pidió que buscara a esa persona para que yo lo viera a solas.
Al principio me resistí, pues me incomodaba ir yo sola, pues hasta ese momento todas las experiencias sexuales las habíamos vivido juntos. Sin embargo, para darle gusto accedí y comencé a ver a ese hombre a solas.
Comencé a verlo cada mes, aproximadamente. Al regresar de cada aventura le contaba a detalle todo lo que había ocurrido y él se ponía muy cachondo. Con el tiempo, me comenzó a pedir que lo hiciera con él sin condón y que no me bañara después de mis encuentros sexuales para que le guardara la leche del «otro».
A partir de que comencé a realizar estas prácticas, organizamos nuestro día para que cuando yo regrese, mi esposo esté disponible para mí. Cuando llego a casa, a él le encanta lamerme la entrepierna y la vulva antes de cualquier otra cosa. Debo decirlo, pero saborea el semen del otro con mucho placer, y eso a mí me pone a mil. Ese día tenemos sexo intenso con orgasmos muy high.
Mi marido dice que no es homosexual, ni le gustan los hombres; sin embargo, cada vez le encanta más que le platique del «otro» y de lo que hacemos juntos.
Lo que me inquieta últimamente, y por eso me atrevo a escribirle, es que cuando regreso de ver a mi amante, tenemos sexo delicioso, pero cuando no, nuestro sexo es mediocre y aburrido, y ni siquiera logra una buena erección.
Me preocupa que sólo se motiva sexualmente cuando estoy con el «otro».
RESPUESTA:
Hola, muchas gracias por la confianza. Tengo algunas dudas. Por ejemplo: ¿qué edades tienen y cuánto tiempo tienen de ser pareja? ¿Cómo se cuidan de las enfermedades de transmisión sexual?
Hablando en concreto del caso de ustedes, es muy normal que con los años se vaya modificando el deseo y ya no sea como al principio, con fuegos artificiales.
Por eso son muy importantes los juegos en pareja y las manifestaciones de la vida erótica, ya que estos elementos pueden mantener el fuego encendido en la pareja.
En el caso de las aventuras con el «otro», creo que en ese momento, es decir, cuando llegas a casa, tu pareja está muy erotizada porque es una experiencia nueva y porque lo hacen en una rica complicidad.
Pero, ojo, lo que ustedes tienen es más importante que lo nuevo, ya que lo nuevo puede ser momentáneo y evaporarse en un instante. Da emoción o excitación, ¡claro! es algo normal, pero eso no significa que pueda sustituir la relación que ustedes han construido.
Valora lo que tienes, ambos están corriendo riesgos al estar experimentando, pero de eso se trata la vida, de correr riesgos, asegúrate siempre de estar consciente de eso.
Hay momentos en la vida que la relación sexual se vuelve rutinaria, acepten que por periodos lo vivirán, sólo fíjate que no se vaya a quedar así por mucho tiempo.
Sigan creando escenarios y juegos nuevos para seguir alimentando su pasión.
El sexo es como una montaña rusa, unos días se está en el piso y otros en la cima. Disfruta todo, hasta los momentos en que se estaciona unos momentos el tren para volver a comenzar.
Sigan disfrutando del sexo como si vivieran en un parque de diversiones. Y sobre mis dudas iniciales, ojalá me vuelvas a escribir para tener un contexto más completo.