Como cada semana, sigo recibiendo tus dudas e inquietudes para apoyarte como psicoterapeuta y sexóloga. Mándame tus preguntas a intza69@yahoo.com
PREGUNTA:
Hola. ¿Qué tal, Rocío? Mi nombre es Edgar, tengo 25 años. Mi problema es que me llaman mucha la atención las prendas de mujer, sobre todo lo que tiene que ver con lencería sexy me encanta.
A la edad de los 11 años pasé por una situación que me dejó marcado. Fui violado y desde ese entonces nació el deseo de ponerme ropa de mujer a escondidas de mis padres. Ahora tengo esposa y un hijo, pero sigo igual.
Le conté mi secreto a mi esposa hace dos años. Desde entonces ella sabe de mi defecto. Me gusta tomar la ropa interior de mi esposa y ponérmela hasta llegar al orgasmo.
He llegado a salir a la calle con ropa interior de mujer puesta y ya estuve con otra persona de mi mismo sexo.
En un principio mi esposa me aceptó, pero después de varias discusiones sin sentido ella me lo ha reprochado y siento que no ha terminado de aceptarme tal y como soy.
Mi autoestima va bajando poco a poco. Me gustaría saber qué hacer ante todo esto: si seguir con ella o me divorcio.
RESPUESTA:
Hola, Edgar. Muchas gracias por la confianza. Lo primero que tienes que quitar de tu mente es pensar que tienes un defecto. Vestirse de mujer o tener gusto por las prendas de mujer no es un defecto, es una preferencia o una manifestación de la vida erótica. Pensar así, es sentir culpa por sentir placer. Nuestros principales problemas como sociedad es sentirnos culpables de todo, hasta que de lo que nos da placer.
Te felicito por decirle la verdad a tu esposa. Muchos no lo hacen por temor a vivir lo que tú estás viviendo, pero, créeme, vivir en la verdad es mucho mejor que vivir escondiéndose.
Me llama mucho la atención que tu esposa haya aceptado tu gusto por el travestismo al inicio, y después ya no.
Es muy posible, lo pienso hipotéticamente, que no es que ella no esté de acuerdo con tus gustos. Más bien, encontró en tu inseguridad un arma para hacerte sentir mal cuando hay una discusión.
Es decir, tú sientes que tienes un defecto al tener la preferencia por vestirte de mujer y ella aprovecha cuando se molesta para hacerte sentir mal. No es que lo haga conscientemente, pero muchas personas cuando se sienten heridas sacan todas las herramientas para herir al otro.
Lo primero que tienes que trabajar es tu aceptación y disfrutar sin culpas tus preferencias. Si has tenido encuentros homosexuales, tampoco significa que lo eres, puede ser sólo una forma de divertirte.
Edgar, no puedes pedir que las personas te acepten si tú mismo no lo haces. Hay muchas personas que cuando ven al otro con mucha seguridad, aceptan sin tanto problema.
Tendrás que hablar no una, sino muchas veces con tu pareja si quieres seguir con la relación. Trata de que te comprenda pero no la presiones. Todas las personas tenemos un tiempo para entender y comprender.
Si no quieres seguir con la relación, trata de quedar en buenos términos, ya que tú no la vas a obligar a que te acepte, ni ella te puede obligar a que dejes de hacer algo que te hace sentir bien y no lastima a nadie.
De cualquier forma, si quieren platicar más del tema acérquense a un terapeuta sexual o psicoterapeuta, es muy necesario que tomes terapia por la violación que sufriste, ya que te puede estar ocasionando problemas de autoestima y seguridad. Espero que muy pronto comiences a disfrutar sin culpa y con mucho gozo.