Ya nos andan rondando. En los mensajes de Whats de la familia, o de la cuadra, o del trabajo. Todos conocemos a un primo que tiene un amigo que tiene una comadre que conoció a un señor que tenía una media hermana que supo que a alguien de su pueblo le pasó.
O nos mandaron un audio de una voz que suena con autoridad y afirma tener información de primera mano.
Tal vez se publicó en Face y ya nos dio nervios.
Así que aquí trataré de desvirtuar esos mitos sobre las casillas, que siempre surgen cuando nos acercamos a la jornada electoral:
La tinta indeleble se borra: en primer lugar, no es tinta, es líquido indeleble. Y no se borra. No es tinta porque no nos pinta el dedo, sino que se trata de un líquido que produce una reacción química al entrar con nuestra piel, que genera una marca con duración de unos cuantos días. Como no es tinta, no se puede borrar.
No intentes quitarte la marca, no lo lograrás, tendrías que usar sustancias o métodos que te harían daño.
El Covid se puede transmitir por el aplicador del líquido indeleble: tampoco es cierto, se trata de una sustancia producida por el Instituto Politécnico Nacional, que no permite la vida de virus o bacterias, entre ellos el del Covid.
Así que no importa qué tan sucio esté el dedo de la persona a quien se lo apliquen antes que a ti, no te va a transmitir ni Covid ni ningún otro virus o bacteria.
Las boletas se pueden falsificar: un mito viejo y desacreditado. ¿Has visto una boleta? ¿te parece que se trata de un tipo de papel común, como cualquiera que podemos comprar? Piensa en las boletas para la gubernatura, que llevan las fotos de las candidatas y los candidatos, ¿crees que se vería igual una fotocopia sacada en la papelería de la esquina?
El papel en que se imprimen las boletas es especial, y estas tienen más candados de seguridad que los billetes en buena parte de los países del mundo. Una reproducción, una fotocopia de una boleta, no sería ni del tamaño adecuado, ni se “sentiría” o vería como una boleta, así que fácilmente sería detectada y no se le tomaría en cuenta.
Por último, si vas a llevar tu pluma, crayón o plumón, te recomiendo que verifiques si es de secado inmediato, porque si no, puede ser que inadvertidamente anules tu voto. Por ejemplo, los marcadores que tienen punta de cincel, en algunas marcas, tardan unos segundos en secarse, de forma que si tu marcas la candidatura de tu preferencia con uno de esos plumones, e inmediatamente doblas la boleta, la tinta se puede pasar y generar una mancha que parezca otra marca más, anulando tu voto.
Así, antes de doblar tu boleta, cuando aún estés en la mampara, verifica que la tinta se haya secado.
No hagas caso de cadenas de mensajes. Decide la candidatura de tu elección y vota con seguridad el día de la jornada.
