ENTREVISTA: PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ/LALUPA.MX
La discusión sobre la fama, el anarquismo, el arte y el interés por la ciencia son los ejes centrales de Los fragmentarios (Trajín, 2023), la más reciente obra del diplomático y escritor Alejandro Estivil, que se desarrolla a partir de un plan para asesinar a Donald Trump, por parte de una persona que padece el Síndrome de Erostráto, un complejo que desarrollan quienes están dispuestos a hacer cualquier cosa para hacerse famosas.
La figura del ahora expresidente de Donald Trump sirve para construir tres personajes que están de acuerdo en participar en el plan del asesinato por fama, arte y anarquismo, en una novela negra que requirió todo un proceso de análisis de la lucha contra la autoridad que tuvo su base en la historia de la república española, del pensamiento de arte moderno y del desarrollo de los productos científicos.
“Es importante toda la creación interna de una personalidad, en esta novela puse muchísima energía en tratar de desarrollar, desde la suma de muchas personalidades y elementos, lo que creo que es notable es un idealismo, porque todo proviene de diferentes composiciones que nuestra vida tiene”, explicó Estivill en entrevista con lalupa.mx.
La historia se desarrolla a principios del 2020 en Washington, DC, cuando Guillem Ferrer, un archivista del Departamento para Asuntos de Veteranos, busca inmortalizarse en la historia como el asesino solitario del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, un político que “simultáneamente produce admiración y odio en su país y en el mundo”.
Inspirado por su novia y ayudado por un familiar, “Guillem Ferrer realiza un recuento de la vida con su hermano, un genio matemático de Cambridge; con su madre, una obsesiva matriarca contemporánea; y con su yayo, un anarquista catalán de la Guerra Civil Española, refugiado en México”.
“Su hermano casi autista, con gran capacidad tecnológica y de análisis lo acompaña en la aventura no por la búsqueda de la fama, sino por hacer un producto, porque quiere meter un arma a la Casa Blanca, hacer un producto que funcione, lo que le importa al hermano no es el asesinato, lo que quiere es saber si su arma puede ingresar a la Casa Blanca, una funcionalidad casi matemática”, detalló el cónsul mexicano en Montreal.
Cada uno de los personajes tiene diferentes motivaciones, como la novia de uno de los hermanos, que participa en el plan maestro convencida de que este proceso es una de las nuevas formas de la humanidad para la producción artística, “algo que está sucediendo en el mundo del arte, pensar que cualquier cosa que hoy hacemos es el resultado de la energía que hemos puesto en el pasado. Este personaje considera que los elementos que ponen los elementos para construir una pequeña pistola que puede ingresar a la Casa Blanca es ante todo un objeto estético y eso es lo que la compromete a participar en este gran complot”.
Una de las figuras importantes en la obra es el abuelo de los hermanos, un personaje muy oscuro del anarquismo en España, que algún momento reniega de este movimiento porque en la agenda del anarquismo catalán de principios del siglo XX está la independencia de Cataluña, “pero el anarquismo negaría hasta una agenda de ese estilo, porque si triunfara no se necesitarían países, ni gobiernos, ni fronteras, es una reducción al absurdo de la inexistencia total de los sistemas de entendimiento que tienen los seres humanos para englobarse unos con otros porque no habría países, ¿quién podría ser diplomático en un mundo donde no hubiera gobiernos? Si se logra (el anarquismo) se niega a sí mismo”.
La novela Los fragmentarios se presentó como parte de una serie exclusiva de editorial Trajín, que reúne otras obras de Alejandro Estivill, como El hombre bajo la piel; Alfil, los tres pecados del elefante y El lugar de los descarnados.
Las obras de Estivill se desarrollan desde la diplomacia a partir de su relación con México que a veces se puede sentir lejano para quienes están fuera del país, pero “México está por todas partes, a veces nos contratacamos, decimos: somos poca cosa, pero cuando estás como diplomático te das cuenta de que nuestra manera de ser no es inocua, cuando alguien piensa en México, en cualquier rincón del mundo, por lo menos hay un estereotipo, de nuestra forma de comer, nuestra cultura, nuestro relajo, nuestro grito con el mariachi, tienen un sentido cultural muy importante y eso nutre”.
Excelente entrevista.
[…] Fuente: https://lalupa.mx/2023/05/13/3-personajes-y-3-motivaciones-para-asesinar-a-trump-alejandro-estivil-p… […]